jueves, 24 de enero de 2013

Datos curiosos de los alimentos


Datos curiosos acerca de la Comida


¿Qué es la "slow food" o comida lenta?: Alimentarse en el sentido de Slow Food significa comer con atención, en especial valorando la calidad y, con ello, teniendo en cuenta la procedencia de las materias primas y el modo de cocinarlas. 

Slow Food surgió en Italia, cuando en 1986 se inauguró una filial de la cadena de comida McDonald’s junto a la gran escalinata de la Plaza España de Roma. Algunos periodistas de los diarios locales organizaron una manifestación celebrando un largo festín para protestar contra la comida rápida e industrial. Como réplica a la tendencia fast food (comida rápida), decidieron que era necesario promover la lentitud en la comida, los productos naturales, las recetas locales, y el deleite en el sentido del gusto, sin prisas. Uno de sus objetivos es salvaguardar el patrimonio alimentario de la humanidad. El movimiento se ha ido ampliando, y hoy está presente en más de 130 países de los cinco continentes. En 2004, la FAO reconoció oficialmente a Slow Food como organización sin ánimo de lucro e instauró con ella una relación de colaboración.

El movimiento distingue a productores, procesadores, comerciantes y gastrónomos que trabajan para comercializar los llamados “alimentos y platos del Arca”, en alusión al Arca de Noé. Además, el movimiento, con su fundación para la biodiversidad, trabaja en pos de la conservación de la variedad de plantas cultivadas y animales de consumo.
¿Qué tipo de personas consumen más sal?: Los individuos con un nivel socioeconómico más bajo consumen más cantidad de sal en las comidas que los bien posicionados, según un estudio británico que publica el último número de la revista médica BMJ Open. También es superior la ingesta de sal en personas con bajo nivel educativo y que desempeñan profesiones que implican trabajos manuales. Por lo tanto, estos sujetos son más propensos a padecer hipertensión, infartos y ataques cardíacos, así como a ser víctimas de fallos renales.

Los autores de la investigación atribuyen estas diferencias a que la dieta de los grupos más desfavorecidos desde un punto de vista socioeconómico incluye alimentos de baja calidad, ricos en sal y en grasas, así como en calorías, además de insanos. El exceso de sal procede, en su mayoría, de alimentos industriales y comidas procesadas.
Cuándo comes es tan importante como qué comes: Si ganas o pierdes peso no solo depende de qué alimentos comes, sino también de cuándo los comes. Científicos del Instituto Salk para Estudios Biológicos (EE UU) han demostrado que mantener horarios regulares de las comidas e intercalar períodos de ayuno puede contrarrestar los efectos adversos de una dieta alta en grasas y prevenir la obesidad y la diabetes, además de mantener el hígado más sano. Sus conclusiones se publican en la revista Cell Metabolism.

En sus experimentos, Satchidananda Panda y sus colegas comprobaron que cuando a ratones con una dieta rica en grasas se les permite comer durante solo 8 horas al día, ingieren tanta cantidad de alimento como los que tienen acceso a la comida 24 horas, pero no desarrollan obesidad ni enfermedades metabólicas. Además, los roedores con horarios de comida restringidos muestran niveles de inflamación más bajos, y su hígado funcionaba mejor. “Cada órgano tiene un reloj”, aclaran los investigadores, que aseguran que hay momentos de máxima eficiencia de nuestros músculos, intestinos, estómago..., así como horas del día en las que están prácticamente en reposo. Estos ciclos metabólicos de los órganos del cuerpo resultan cruciales para la ruptura del colesterol y la producción de glucosa, y deberían tenerse en cuenta a la hora de decidir cuándo comer.

Según Panda, hay razones para pensar que nuestros patrones de alimentación han cambiado mucho en los últimos años, ya que la gente tiene acceso a los alimentos a cualquier hora, y la tendencia a trasnochar, incluso si es solo para ver la televisión, se acompaña del hábito de “picar algo”. Para comprender mejor la epidemia de obesidad, insiste el investigador, habría que analizar no solo qué comen las personas sino cuándo comen.
¿Que alimentos nos ayudan a dormir a pierna suelta?: Los antiguos egipcios utilizaban la cebolla para inducir el sueño, y lo cierto es que no iban desencaminados. La cebolla, sobre todo si es roja o chalota, contiene quercetina, una sustancia con efectos antioxidantes, antiinflamatoria y sedante, que ayuda a conciliar el sueño. Un vaso de vino también puede ser compañía recomendable antes de ir a dormir, ya que reduce la presión arterial y el ritmo cardíaco sumiéndonos en un agradable estado de relajación.

Sin embargo, el mejor antídoto contra el insomnio ha resultado ser el zumo de cereza. Según un estudio del Centro Médico de la Universidad de Rochester (EE UU) publicado hace algún tiempo en la revista Journal of Medical Food, esta bebida no reduce el tiempo que tardamos en conciliar el sueño pero, una vez que estamos dormidos, aumenta su profundidad. En una serie de experimentos, los científicos demostraron que los insomnes que tomaban un vaso de zumo por la mañana y otro vaso dos horas antes de irse a la cama, se despertaban menos durante la noche y amanecían más descansados.
¿Por qué la falta de sueño aumenta el apetito?: Un equipo de biólogos estadounidenses ha logrado aislar genes que regulan el conflicto sueño-hambre. El hallazgo, que aparece publicado en el último número de Current Biology, arroja luz sobre cómo escoge el cerebro entre distintas conductas claves para la supervivencia.

Estudios anteriores mostraban que los sistemas neuronales que controlan el sueño y la alimentación en los mamíferos están interconectados, de modo que la falta de sueño hace que tengamos ganas de comer y el hambre quita las ganas de dormir. Sin embargo, se sabía poco sobre los genes y bases neuronales de esta interacción.

Para encontrar una explicación, investigadores de la Universidad de Nueva York y de la Universidad de Massachusetts examinaron a la mosca de la fruta Drosophila melanogaster, que cuenta con genes similares a los de los mamíferos para controlar el sueño, la vigilia y el metabolismo. En primer lugar, los científicos determinaron que en las moscas la privación de alimento les producía insomnio, lo que significa que la falta de comida afecta sus conductas de sueño del mismo modo en que lo hace sobre el sueño de los mamíferos.

Tras realizar un 'screening' inicial de 2.000 genes, identificaron cerca de 12 genes implicados en la interacción entre alimentación y sueño. Entre esta docena de genes, eligieron dos -Clock (Clk) y cycle (cyc)- que juegan un papel en la regulación del reloj biológico de las moscas de la fruta y que están también presentes en los mamíferos. Examinando a moscas de la fruta con y sin los genes Clk y cyc en condiciones de privación de alimento, demostraron que las moscas hambrientas que no tenían ambos genes dormían tres o cuatro veces menos, en comparación con aquellas que sí poseían estos genes. Así, los resultados demostraron que los genes ayudaban a conciliar el sueño en condiciones de privación de la alimentación.
"Sabemos que el cerebro está conectado para realizar más de dos acciones a la vez, pero era menos evidente el rol que los diferentes genes jugaban en estas acciones", ha explicado Alex Keene, autor principal del estudio.
¿Existen los alimentos con "calorías negativas"?: Cuando para comer y digerir un alimento hace falta invertir más calorías de la que ese alimento aporta, es frecuente decir que tiene “calorías negativas”. Es el caso de las naranjas, el apio, el tomate, los espárragos y el pepino, entre otros. También se estima que el un tallo de brócoli, que puede aportar en torno a 25 calorías, consume 80 calorías de nuestro organismo cuando se ingiere. Sin embargo, lo cierto es que el concepto de las calorías negativas no ha sido probado científicamente, y de momento nada indica que se logre perder peso al ingerir estos alimentos.

Según advierten los expertos, la única estrategia científicamente probada para obtener un "balance negativo" en lo que a calorías se refiere es llevar una dieta sana y equilibrada y aumentar el consumo de calorías a través del ejercicio físico.
Cuatro alimentos que te ponen de buen humor: En el año 2000, el psiquiatra Andrew Stoll, de la Universidad de Harvard (EE UU), demostró que los ácidos grasos omega-3, presentes entre otros alimentos en las nueces, tenían un efecto antidepresivo y estabilizaban el estado de ánimo. Y unos años más tarde, una investigación de la Escuela de Medicina de la Universidad de Pittsburg determinó que personas saludables con un bajo nivel sanguíneo de omega-3 tienen más posibilidades de tener ideas pesimistas y deprimirse que quienes tienen valores normales de este ácido graso. Además, según un estudio reciente de la Asociación Británica para el Manejo de la Ira, una dieta rica en omega-3 nos permite gestionar mejor las situaciones estresantes, hasta el punto de que reduce la hostilidad hacia los compañeros de trabajo y hasta evita que gritemos a otros conductores mientras circulamos por zonas de tráfico intenso.

Este ácido graso no es el único ingrediente con efectos antidepresivos. La tristeza crónica también puede achacarse a bajos niveles de aminoácido treonina, un desequilibrio que, tal y como demostraron hace poco científicos del Princenton Brain Bio Institute, se puede combatir añadiendo a la dieta un puñado de semillas de sésamo. Por otra parte, las pipas de calabaza son ricas en zinc, un mineral que según la Academia Polaca de Ciencias mantiene a las neuronas vivas y es necesario para convertir el aminoácido triptófano en serotonina. A esto se suma que el azafrán también ha sido identificado como un remedio natural contra la depresión en un estudio reciente de la Universidad de Teherán, en Irán.
¿Hay alimentos que nos espabilan y comidas que nos relajan?: Así es. Según Judith Wurtman, investigadora del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), las proteínas de los huevos, la carne o el pescado aportan al cerebro tirosina, un aminoácido que aumenta la producción de los neurotransmisores que mantienen la mente alerta, concentrada y productiva (dopamina y noradrenalina). Cuando caen los niveles de tirosina sufrimos apatía y falta de motivación.

Si las proteínas consiguen espabilarnos y aceleran el pensamiento, la relajación suele venir de la mano de los hidratos de carbono (patatas, pasta, arroz, miel, plátanos, frutos secos, palomitas...). Estos alimentos inducen la liberación de insulina, que elimina de la sangre casi todos los aminoácidos excepto el triptófano, que ejerce un efecto calmante. Según ha demostrado el marido de Judith, Richard Wurtman, un neuroendocrinólogo que también trabaja en el MIT, el triptófano es la materia prima que usa el cerebro para producir serotonina, el neurotransmisor del bienestar, que además reduce el dolor y el apetito y ayuda a conciliar el sueño. Eso sí, tal y como advierte Wurtman, hay que tener en cuenta que, si en el plato se mezclan carbohidratos con proteínas, el efecto calmante de los primeros se anula.
Comer pescado nos vuelve más pacíficos: Según el psiquiatra Joseph Hibbeln, el cambio de hábitos alimentarios puede hacer mella en toda una sociedad. Sus estudios demuestran que la incidencia de depresión severa, e incluso de homicidios, es mucho menor en los países donde se consume mucho pescado, como Japón, especialmente si es rico en omega-3 (el salmón, la sardina, el atún y la caballa). “El omega-3 aumenta la producción de serotonina, la hormona del bienestar. Por eso, la violencia pandémica en la sociedad occidental podría estar relacionada con la alimentación”, señala el especialista norteamericano, haciendo alusión a que consumimos mucha carne y poco pescado. Varios estudios han respaldado sus hallazgos.

El omega-3 del pescado también actúa como antídoto contra el estrés. Una investigación de la Universidad de Lausana, en Suiza, concluyó que tomar suplementos diarios de esta sustancia durante tres semanas reducía drásticamente la fabricación de hormonas relacionadas con el estrés, sobre todo de cortisol y adrenalina. La Asociación Británica para el Control de la Ira sostiene que una dieta abundante en este ácido graso poliinsaturado reduce la hostilidad hacia los compañeros de trabajo y hasta evita que gritemos a otros conductores.
¿Comer helado combate el mal humor?: Según un estudio reciente del Centro Médico de la Universidad de Maryland, los helados contienen triptófano, un aminoácido que nos calma y reduce la agresividad, aumentando la producción de serotonina (la hormona del bienestar). Eso ayuda a combatir el estrés, a relajarnos y a dormir mejor.

Por otro lado Jane Jakubczak, dietista de la Universidad de Maryland, ha demostrado que elegimos ciertos alimentos según nuestro estado de ánimo, guiados por lo que se conoce como el “apetito emocional”. Cuando estamos contentos, tendemos a optar por un gran filete de carne a la parrilla o una pizza; la sensación de tristeza nos impulsa a comer helados y galletas; y ante el aburrimiento, solemos atiborrarnos de patatas fritas.
¿Es recomendable comer chocolate para hacer deporte?: Un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad de California en San Diego (EE UU) que publica la revista Clinical y Translational Science demuestra que el cacao puro puede aumentar la capacidad de hacer ejercicio físico.

Concretamente, los investigadores trabajaron con pacientes que habían sufrido daños en las mitocondrias del músculo esquelético. Las mitocondrias son responsables de producir energía en las células, y suelen verse alteradas en diabéticos y en personas con fallo cardíaco. Estos pacientes suelen acusar falta de energía física y fatiga, dificultad para respirar y caminar, etc.

Los participantes en el experimento consumieron barras de chocolate negro con contenido extra de epicatequina, un flavonoide natural propio del cacao. Después de tres meses, las biopsias de sus músculos mostraron incrementos importantes en el número de mitocondrias, que además tenían más crestas en su interior, un indicador del aumento de eficiencia a la hora de producir energía para abastecer a las células.
El sabor del chocolate líquido depende del color de la taza: Una taza de chocolate caliente sabe mejor en un recipiente de color crema o naranja que en un vaso blanco o rojo, según un estudio realizado por científicos de la Universidad Politécnica de Valencia y la Universidad de Oxford.

“El color del recipiente donde se sirven los alimentos y las bebidas puede realzar algunos de sus atributos, como el sabor o el aroma”, explica a la agencia SINC Betina Piqueras-Fiszman, coautora del estudio. La científica, junto a su colega Charles Spence de la Universidad de Oxford (Reino Unido), lo ha comprobado en el caso del chocolate líquido.

La pareja planteó un experimento donde 57 participantes tenían que evaluar muestras de chocolate caliente servido en cuatro tipos de vasos de plástico, del mismo tamaño pero de diferente color: blanco, crema, rojo y naranja. Los resultados, que publica la revista Journal of Sensory Studies, revelan que el sabor del chocolate servido en los vasos naranja y color crema gustó más. Sin embargo, el dulzor y el aroma apenas se vieron influidos por el color de la taza.

Según el estudio, estos resultados son relevantes para los científicos interesados en comprender como el cerebro integra la información visual, no solo de la propia comida, también del recipiente o el envase en el que se consume.

En el mismo artículo se repasan las conclusiones de otros estudios anteriores que también confirman el efecto del recipiente sobre las características sensoriales de la bebida o el alimento. Los ejemplos son numerosos: desde latas más amarillas para percibir mejor el sabor a limón, hasta vasos de refresco que si están pintados de colores fríos, como el azul, parecen saciar mejor la sed que si el tono es cálido, como el rojo. Y si son rosas, el líquido incluso se nota más azucarado.
Comer y beber demasiado nos hace perder horas de vida: En este trabajo Spiegelhalter ha querido encontrar una manera sencilla de comunicar el impacto de nuestro comportamiento en la esperanza de vida y para ello ha utilizado una nueva medida a la que ha denominado ‘microvida’ y que define como media hora de esperanza de vida: “Equivale a una millonésima de vida después de los 35”, explica.

Usando datos de diversos estudios de población, Spiegelhalter estima que perdemos una ‘microvida’ cada vez que fumamos dos cigarrillos, por tener cinco kilos de sobrepeso, al beber una segunda o tercera copa en un día, si optamos por ver durante dos horas la televisión o nos comemos una hamburguesa. Por el contrario, se pueden ganar ‘microvidas’ no tomando más de una bebida alcohólica al día, comiendo abundante fruta y vegetales y haciendo ejercicio, añade.

Según Spiegelhalte, los factores demográficos también pueden expresarse en ‘microvidas’. Por ejemplo, solo por ser mujer se ganan cuatro ‘microvidas’ al día en comparación con los varones; y los hombres suecos tienen 21 'microvidas' más al día que los rusos. Vivir en 2010 en vez de 1910 supone una ganancia de 15 ‘microvidas’ diarias.
¿Qué pasa si mezclamos comida con medicamentos?: La mayoría de los prospectos de los fármacos que tomamos nos informan de sus efectos secundarios, pero pocas veces explican cómo interactúan con las comidas. En general la comida no disminuye la eficacia del medicamento, aunque en algunos casos este efecto puede producirse, o incluso puede haber otras consecuencias indeseables.

La Fundación Española del Corazón hace algunas recomendaciones sobre con qué alimentos acompañar, o no, determinados fármacos. Por ejemplo, el ácido acetil salicílico, presente en la aspirina, se debe tomar con las comidas, ya que puede irritar el estómago. Por otro lado, los pacientes con problemas de corazón que toman fármacos cardiológicos deben tener cuidado con el zumo de pomelo, ya que altera el pH del intestino delgado y puede favorecer la toxicidad del medicamento. Y en el caso de las pastillas para evitar la tensión alta, también hay que estar atento: si los fármacos pertenecen al grupo IECAs, conviene evitar los sustitutos de la sal que contengan potasio, ya que estos medicamentos interfieren con la correcta eliminación del mineral.
Los anticoagulantes son otro grupo de medicamentos que se prescriben a muchas personas. Los expertos recomiendan que en esos casos hay que evitar el consumo excesivo de brócoli y coles de bruselas, la papaya, el ajo el jenjibre, el regaliz, el hígado de vaca y el té verde, ya que pueden reducir el efecto de la pastilla. Por otro lado, el consumo de alcohol puede potenciar la acción anticoagulante en el caso de que este contenga acenocumarol.

Además, hay que recordar que no conviene abusar de los fármacos. Por ejemplo, la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria ha alertado de que más de 8,5 millones de españoles ingieren dosis diarias de ibuprofeno más altas de las recomendadas. Mientras que para los dolores de cabeza leves o moderados bastaría una dosis de 400 miligramos, el 80 por ciento de las unidades dispensadas por las farmacias son de 600 miligramos. Los expertos explican que los efectos secundarios y el riesgo de sufrir un accidente cardiovascular aumentan cuando se incrementa la dosis de este medicamento.
¿Lo que comemos depende de quién se sienta con nosotros a la mesa?: Etimológicamente, los expertos sugieren que la palabra "compañero" procede de los términos latinos comedere y panis, y por tanto alude a "quienes comen o comparten el mismo pan". Ahora un estudio de la Universidad Mcmaster (EE UU) revela que nuestros compañeros de mesa a la hora del almuerzo o de la cena nos condicionan a la hora de escoger qué comemos. Concretamente, según Meredith Young, coautora de la investigación, las mujeres suelen pedir alimentos bajos en calorías cuando comen en un grupo con presencia de uno o más hombres. Esto se debe a que, por lo general, las elecciones a la hora de alimentarnos están condicionadas por la percepción que otros tienen de nosotros. Y las raciones más pequeñas y sanas se consideran más femeninas, por lo que las mujeres “se sienten más atractivas si comen menos calorías en presencia masculina”, afirma la investigadora en la revista Appetite.

En cuanto a los hombres, el estudio concluye que la elección del plato no se ve afectada ni por el número de acompañantes ni por su género.
Comida para inhalar: David Edwards, profesor de la Universidad de Harvard ha creado en su laboratorio Le Whaf, un dispositivo con forma de pecera que permite inhalar una tarta de limón o cualquier otro sabroso alimento sin necesidad de ingerirlo. El resultado es lo que él llama una “nube de sabor”: microgotas que forman bocanadas de humo y al respirarse ofrecen una completa experiencia de sabor sin necesidad de consumir ni una sola caloría.

No es el primer trabajo del investigador de Harvard en esta línea. En 2009, Edwards inventó Le Whif, un original inhalador de chocolate que lanzó a la venta con el eslogan “tan dulce como el chocolate, tan ligero como el aire”. El éxito fue inmediato: tras lanzar el producto en el mes de abril, vendió 25.000 unidades en un solo mes, agotando todas sus existencias.

Ahora ha decidido usar el mismo dispositivo para comercializar vitaminas inhalables con tres formatos: té verde antioxidante, té de vino antienvejecimiento con resveratrol y té de hibiscus multivitamínico. “Se respira y se absorbe en la boca, sin llegar al tracto digestivo, de modo que una mayor concentración de vitaminas y suplementos alcanza el torrente sanguíneo”, defiende su creador, que también ha desarrollado café inhalable, otro gran éxito comercial en Francia, Japón y Estados Unidos.
La adicción a la comida y el acaparamiento compulsivo son las nuevas enfermedades mentales: La adicción a la comida y el acaparamiento compulsivo se consideran nuevas patologías, según la quinta edición del Manual de Diagnósticos y Estadísticas de Enfermedades Mentales (DMS, por sus siglas en inglés). Entre las modificaciones del conocido manual, que acaba de revisar la Asociación Psiquiátrica Estadounidense (APA) después de veinte años para incluir los hallazgos científicos más recientes, también destaca la exclusión de la lista de trastornos mentales de la adicción a las relaciones sexuales (o trastorno hipersexual), de la adicción a jugar en Internet y de la transexualidad (o trastorno de identidad de género). Así mismo, deja de considerarse el duelo por la muerte de un ser querido durante menos de dos meses como trastorno depresivo.

Por otro lado, la nueva versión del manual incluye el Trastorno de Desregulación Disruptiva del Estado de Ánimo (DMDD) con el cual se diagnosticará a niños que "tres o más veces a la semana exhiben episodios frecuentes de irritabilidad, arrebatos y berrinches durante más de un año". De este modo esperan evitar el excesivo (y errado) diagnóstico de casos de trastorno bipolar en la infancia.

En cuanto al trastorno conocido como acaparamiento compulsivo, los psiquiatras aseguran que “ayudará a caracterizar a los individuos con dificultad persistente para deshacerse de pertenencias y objetos que carecen de valor.” Un problema que suele afectar a la estabilidad emocional, a las relaciones sociales y a las finanzas de quienes lo padecen.

El manual también unifica las categorías de abuso de sustancias y dependencia de sustancias, además de ampliar los criterios para diagnosticar un trastorno del aprendizaje, incluyendo todas las anomalías que interfieren con la adquisición del lenguaje y su uso oral, escrito o destinado a expresar conceptos matemáticos.

Otro cambio importante en el DSM-5, apodado “la Biblia de la Psiquiatría”, es que los términos “autismo” y “síndrome de Asperger” desaparecen, y son englobados bajo un nuevo término: trastorno del espectro autista. El objetivo, dicen los expertos, es diagnosticar de forma más precisa a los niños que padecen la enfermedad.
Confirmado: la comida rápida y la depresión van de la mano: Un estudio liderado por científicos de dos universidades españolas ha puesto de manifiesto una vinculación entre la alimentación basada en la comida rápida y el riesgo de sufrir estados depresivos. La investigación se ha publicado en la revista Public Health Nutrition.
Bollos industriales, hamburguesas, perritos calientes, pizza... Como explicaba una de las autoras del estudio, Almudena Sánchez-Villegas, a la agencia de noticias científicas SINC, "cuanta más comida rápida se consume, mayor es el riesgo de depresión", lo que indica no solo una vinculación cualitativa sino también cuantitativa. Y es que de hecho, según los datos manejados por los científicos, quienes consumen comida rápida presentan un incremento del riesgo de desarrollar depresión del 51 por ciento mayor respecto a aquellos que no se alimentan de este tipo de comida.
Dos han sido los estudios que han certificado este vínculo. En un primer análisis publicado el pasado año en al revista PLoS One se analizaron 12.059 personas durante seis años, cuantificándose un incremento del riesgo de depresión del 42 por ciento. En este nuevo trabajo realizado sobre 8.964 personas que nunca habían tenido depresión, dentro del proyecto de Seguimiento Universidad de Navarra, los resultados han sido todavía más extremos. Como apuntan los resultados entre todos los participantes en el análisis, al cabo de una media de seis años, 493 fueron diagnosticados de depresión o comenzaron a tomar antidepresivos. O lo que es lo mismo, un incremento del 51 por ciento respecto a quienes no tomaban comida rápida.
Según el análisis, quienes ingerían más bollería industrial y comida rápida son más propensoa  a estar solteros, ser menos activos y tener un "patrón dietético peor" apuntan desde SINC. Además, según los investigadores, el consumo de tabaco y el mayor volumen de trabajo eran otras características destacadas de las personas que consumían más comida de este tipo.
Ante estos alarmantes datos la profesora Sánchez-Villegas, de la Universidad de las Palmas de Gran Canaria es tajante "aunque son necesarios más estudios, debería controlarse el consumo de este tipo de alimentos debido a su implicación en la salud, tanto física como mental".
¿Cuántas veces es recomendable masticar la comida?: Hasta 40 veces, según sugiere un reciente estudio de la Universidad de Iowa (EE UU). La razón es que masticar con insistencia los alimentos antes de tragarlos reduce la cantidad que comemos, porque disminuye el hambre y el "deseo" que nos hace devorar más de lo que necesitamos. Además, al comer despacio aumentan los niveles de CCK, una hormona relacionada con la saciedad, y se reduce la concentración de grelina, la hormona que estimula el apetito en el cerebro.

Para llegar a esta conclusión, James Hollis y sus colegas pidieron a varios voluntarios que comieran pizza, la mitad masticando cada bocado 15 veces y la otra mitad 40 veces. Además de reducir la “gula” al masticar, en el segundo grupo los investigadores observaron que se favorecía la absorción de nutrientes durante la digestión.
Los fines de semana comemos más y peor: Si estás a dieta y tienes la sensación de que durante el fin de semana pierdes menos peso, estás en lo cierto. Según un estudio de la Escuela Médica de la Universidad de Washington (EE UU), comemos más cantidad de alimentos los fines de semana que durante los días laborables, lo que unido a la tendencia a reducir el nivel de ejercicio físico durante el sábado y el domingo hace que dejemos de perder tanto peso como esperábamos.

Por otra parte, un estudio publicado hace poco en la revista Appetite revelaba que dos de cada tres adultos españoles comen fruta en el almuerzo y la cena solamente de lunes a viernes, pero dejan de consumirla al llegar el fin de semana. A esto se suma que en el fin de semana tendemos a saltarnos el equilibrio recomendado por la "pirámide alimenticia". Concretamente, otra investigación dada a conocer en la publicación Journal of Public Policy & Marketing desvelaba que consumimos más alimentos ricos en caloría, sobre todo grasas, desde la noche del viernes hasta el domingo.
¿Por qué no nos atrae la comida azul?: Los consumidores prefieren los alimentos y las bebidas de color rojo, naranja y amarillo, y rechazan los colores sintéticos que no se encuentran de forma natural en el mercado. Así se desprende de una encuesta realizada por el grupo Nielsen entre 5.000 sujetos de diez países (Estados Unidos, México, Brasil, Reino unido, Francia, Polonia, Rusia, India China y Australia).

De hecho, la comida de color azul o morado genera cierto rechazo, incluidas las gominolas, los caramelos y las bebidas y licores que son coloreados artificialmente con esta tonalidad. Los blancos y los verdes, sin embargo, sí suelen funcionar bien, algo que tiene muy en cuenta la industria alimentaria a la hora de seleccionar colorantes. Los expertos sugieren que uno de los motivos del rechazo al azul es que en las comidas naturales pueden ser indicadores de que un alimento, por ejemplo la carne, se encuentra en mal estado, es tóxico o tiene hongos, lo que implica que no nos sentará bien.

Por otra parte, un estudio reciente publicado en la revista Journal of Consumer Research revelaba que el color de los alimentos influye en la percepción del sabor de los alimentos. En experimentos en los que se mantenía la dulzura de un zumo de naranja pero se alteraba su color, los investigadores observaron que cuanto más intenso era el color naranja más dulce percibían los sujetos su sabor.
Comer menos mantiene el cerebro joven: Un equipo de investigadores italianos de la Universidad del Sagrado Corazón en Roma  (Italia) ha descubierto una molécula llamada CREB1 que se activa en el cerebro de ratones sometidos a una dieta baja en calorías. Según publican hoy Giovambattista Pani y sus colegas en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), la molécula activa a su vez a genes ligados a la longevidad y al buen funcionamiento del cerebro. “Nuestra esperanza es encontrar un modo de poner en funcionamiento a CREB1, por ejemplo a través del fármacos, para mantener el cerebro joven sin necesidad de llevar una dieta tan estricta como la que siguen los roedores”, explica Pani.

Y es que la restricción calórica de los animales sometidos a los experimentos implica que solo pueden comer un 70% de lo que ingieren normalmente. En estas condiciones, los ratones no sufren ni obesidad ni diabetes, tienen un mayor rendimiento cognitivo y mejor memoria, aumentan su capacidad de aprendizaje y son menos agresivos. Tampoco desarrollan alzhéimer a edades avanzadas o lo hacen con síntomas menos severos que los que se alimentan de manera normal. “Hay una relación entre las enfermedades metabólicas y el declive en las capacidades cognitivas”, concluyen los científicos.

Y todo gracias a CREB1, que entre otras cosas activa a unas proteínas llamadas sirtuinas, que parece tener parte del secreto de la fórmula de la “eterna juventud”. Eliminando la molécula CREB1, sin embargo, todos los beneficios de la restricción calórica se esfuman. “Hemos identificado al mediador clave de los efectos de la dieta sobre el cerebro”, añade Pain.
El sabor salado no es igual para todos: Los alimentos bajos en sal pueden saber más salados a unas personas que a otras. Así lo indica una investigación realizada por científicos de la Universidad Estatal de Pensilvania (EE UU) y publicada en la revista Physiology & Behavior, que señala cómo la genética tiene su parte de influencia en la cantidad de sal que nos gusta en los alimentos.

La investigación contó con 87 participantes, de 20 a 40 años, que degustaron alimentos salados a lo largo de varias semanas. La intensidad del gusto fue tasada en una escala de uso común entre los científicos, que oscila entre una sensación apenas detectable y la sensación más intensa, sea cual sea su tipo.

"A la mayoría de nosotros nos gusta el sabor de la sal. Sin embargo, algunas personas toman más sal porque les gusta más el sabor de las comidas saladas y también porque la necesitan para disimular otros sabores desagradables de las comidas”, afirma John Hayes, autor principal del estudio . "Los supercatadores, personas que experimentan el gusto de una forma más intensa, consumen más sal que quienes no tienen tan desarrollado el sentido del gusto. El sabor predominante de los aperitivos es el salado y, al menos en estas comidas, cuanta más sal mejor, por lo que parece que este tipo de comidas gusta más a los supercatadores", continúa.

No obstante, estas personas también necesitan niveles más altos de sal para ocultar los sabores amargos y desagradables de alimentos como el queso. “El queso es una combinación fantástica de sabores lácteos por la leche fermentada y de sabores amargos por la maduración que se disimulan con la sal. Un supercatador encuentra desagradable un queso con bajo contenido en sal porque destaca más el sabor amargo”, subraya Hayes.

Las dietas con un alto contenido en sal pueden aumentar el riesgo de padecer hipertensión arterial y los accidentes cerebrovasculares. Actualmente en algunos países como EE.UU. se consume el doble o el triple de la cantidad de sal recomendada para la salud. ?Por eso John Hayes aconseja reducir la ingesta de sal leyendo las etiquetas de los alimentos y buscando productos que contengan menos de 480 miligramos de sodio por ración.

Los supercatadores

“Los supercatadores describen los alimentos amargos como extremadamente amargos, mientras que otras encuentran esos mismos componentes amargos insípidos o solamente un poco amargos. Las personas que perciben más el sabor amargo también perciben más el sabor salado de la sal de mesa, el sabor dulce del azúcar de uso común, el sabor picante de la guindilla y el cosquilleo que producen las bebidas con gas”.

Según Hayes, es como si los supercatadores vieran la alimentación en colores vivos, mientras que los demás la ven en color pastel. “Las personas con el sentido del gusto poco desarrollado es más probable que añadan más sal a las comidas en la mesa porque necesitan más cantidad para percibirla con la misma intensidad que un supercatador. Sin embargo, la mayor parte de la sal que consumimos proviene de la que se añade a las comidas preparadas y no del salero”, concluye.
Para adelgazar, piensa en comida: Un grupo de científicos de la Universidad Carnegie Mellon (Pittsburgh, EE UU) ha descubierto que ante el deseo de comer chocolate y dulces, la acción de imaginarse tomando grandes cantidades de estos productos puede ser suficiente para calmar el apetito, según publica la revista Science.

En una serie de experimentos, los investigadores comprobaron que si uno se imagina un bombón de chocolate o un trozo de queso y se visualiza degustando cada bocado, masticando y tragando, normalmente come menos cuando, a continuación, le ofrecen el alimento real. El efecto se explica por el fenómeno de la habituación, que hace que mientras para la mayoría de la gente el primer bocado de cada comida es el mejor, a medida que seguimos ingiriendo el alimento cada bocado resulta menos atrayente que el anterior. La doctora Carey Morewedge y sus colegas han comprobado que la imaginación puede ser suficiente para que una persona se habitúe a los alimentos y, por tanto, para que a la hora de consumirlos de verdad ya no despierten el mismo interés. Una estrategia interesante a tener en cuenta para aquellos que intentan perder peso.

“Hasta cierto punto, la mera imaginación de una experiencia es un sustituto de la experiencia real. La diferencia entre imaginar y experimentar puede ser más pequeña de lo que se suponía”, subraya Joachim Vosgerau, coautor del estudio.
Comida recién salida de… la impresora: Científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han inventado una “impresora personal de alimentos”. Bautizado como Digital Fabricator, el nuevo dispositivo almacena y refrigera ingredientes, los combina, los cocina y los “imprime” a gusto del consumidor. Y mientras vierte cada contenido en “cabezales” de impresión independientes puede enfriarlos o calentarlos. Y todo con una precisión milimétrica.

Los investigadores aseguran que el nuevo proceso de "cocina por impresión" lleva a la industria de la alimentación hasta la era digital, y que permitirá desarrollar nuevas texturas y sabores hasta ahora imposibles de obtener con las técnicas tradicionales. Además, los usuarios del aparato podrán controlar el valor nutricional exacto y la calidad de cada comida que preparan gracias a una pantalla táctil en la que pueden escoger parámetros como el contenido de carbohidratos y grasas. Y, por supuesto, contabilizar las calorías. Por si fuera poco, con este dispositivo la comida se fabrica capa a capa, lo que también ofrece interesantes posibilidades estéticas.

La Digital Fabricator dispone de conexión a Internet para proporcionar al consumidor todos los datos del origen, cualidades, valor nutricional y sabor de cada ingrediente que utiliza. Además, el dispositivo está programado para sugerir al “chef” un ingrediente alternativo cuando se gasta alguna materia prima.
¿Comprar comida en envases pequeños nos hace engordar?: En teoría, los paquetes de snacks de 100 calorías han sido concebidos para ayudarnos a combatir el sobrepeso y la obesidad. Pero un estudio publicado en la revista Journal of Consumer Research sugiere que tienen el efecto contrario. Es más, consumir patatas fritas en paquetes pequeños puede hacernos comer exactamente el doble que si optamos por los paquetes grandes.

Además, las personas que consumen aperitivos en envases pequeños dudan menos antes de abrir un nuevo paquete. Según los autores, todo apunta a que la distribución de los alimentos en porciones reducidas hace que nos “autoengañemos” y seamos más indulgentes con el consumo de calorías.

Si además abrimos estos snacks delante de la “caja tonta”, el efecto se agrava. Según publicaba hace poco la revista Archives of Internal Medicine, sentarse frente a la televisión más de cinco horas al día potencia el sobrepeso. La buena noticia es que reduciendo a la mitad el consumo televisivo se pueden quemar en torno a 120 calorías más por término medio cada día.
¿Por qué la comida picante nos hace sudar?: La capsaicina presente en la pimienta picante, la cayena, la mostaza de Dijon, el chile, el tabasco y la páprika, entre otras sustancias, estimula los receptores de calor y dolor de la epidermis, provocando así una irrigación sanguínea más intensa y una fuerte sensación de quemazón en la boca. El cerebro "engañado" cree que la temperatura corporal está aumentando peligrosamente, y pone en marcha los mecanismos necesarios para evitarlo, entre ellos el sudor y la dilatación de los vasos sanguíneos (que causan el rubor).

La parte positiva es que la capsaicina, a concentraciones adecuadas, también favorece en el cerebro la producción de endorfinas, que son moléculas que promueven la sensación de bienestar.
¿Cuál es la máxima cantidad de comida que cabe en el estómago?: El estómago es un órgano elástico que da mucho de sí. Cuando está vacío, tiene un volumen de unos 50 ml, pero puede dilatarse 80 veces y almacenar hasta 4 litros de alimentos. Si una persona insiste en ingerir más, puede acabar vomitando.
El tiempo de permanencia de la comida depende de su composición. Mientras que el agua y la sopa apenas se detienen, otros líquidos, como la leche, se quedan un rato. El pan y la carne son expulsados al cabo de 2 ó 3 horas, y las grasas, a las 7 u 8. Así, la panza se llena a tope con raciones de fast food.
Comer chocolate en el desayuno ayuda a adelgazar: Un estudio de la Universidad de Tel Aviv ha demostrado que tomar dulces, incluído chocolate, como parte de un desayuno equilibrado de 600 calorías en el que también se incorporen proteínas y carbohidratos puede ayudar a perder peso. La clave, dicen los investigadores, es ser “indulgentes” por la mañana, cuando el metabolismo corporal es más activo y somos capaces de quemar las calorías "extra" a lo largo del día. Si evitamos del todo los dulces se puede crear una adicción psicológica a largo plazo. Pero añadiendo postres al desayuno evitamos los antojos el resto del día, concluyen los científicos en la revista Steroids.

En un experimento llevado a cabo a lo largo de varias semanas con casi doscientos sujetos obesos adultos, hombres y mujeres, que debían someterse a dieta, los autores del estudio comprobaron que los que incorporaban galletas o chocolate a su primera comida del día adelgazaban más y mantenían por más tiempo la pérdida de peso. En concreto, mientras la mitad del grupo ingería una dieta baja en carbohidratos con un desayuno de solo 300 calorías, la otra mitad de los participantes desayunaba un total de 600 calorías, con alimentos ricos en proteínas y carbohidratos, incluyendo un trozo de pastel de chocolate. Aunque al principio todos perdían el mismo peso, a la larga (en 32 semanas) el segundo grupo perdió una media de 18 kilos más.

El desayuno es la comida que más eficientemente controla los niveles de grelina, la hormona responsable del hambre voraz, explica Daniela Jakubowicz, coautora del trabajo. Aunque habitualmente los dietistas aconsejan abandonar el consumo de dulces para perder peso, los investigadores israelíes señalan que eso no es necesario en el desayuno. Suprimirlos por completo aumenta incluso los deseos de ingerir esos alimentos.
Comer con los ojos: Todos reconocemos que la presentación de las comidas, el aspecto de los alimentos y en particular el color de los mismos desempeña un papel esencial a la hora de su aceptación y disfrute. Un amigo, miembro de la directiva de la asociación de padres de un colegio, me contó que a la hora de aprobar los menús ofrecidos a los alumnos tuvieron que ir matizando progresivamente, y donde en un principio anunciaban “helado de chocolate” pasaron a escribir “helado sabor chocolate” y terminaron el curso declarando “helado color chocolate”. El sentido de la vista es determinante a la hora de apreciar un alimento. Un ejemplo: en una exposición del Museo de las Ciencias de Valencia en colaboración con el Exploratorium de San Francisco en la que se presentaba una máquina expendedora de caramelos de distintos colores, se preguntó a los asistentes el sabor de los mismos. La mayor parte optó por decir que los verdes eran de menta, los amarillos de limón y los rojizos de fresa, aunque en realidad no se trataba de esos sabores.

De ahí nace la importancia de una “cata ciega”, como la que hizo Dom Pérignon para escoger las mejores uvas para el champagne. Así, aunque el vino resultante fue blanco, una de las variedades que había seleccionado era la tinta Pinot Noir. El secreto para obtener un caldo pálido consistía en no dejar que la piel de las uvas desprendiese sus taninos al mosto. Pero la realidad es que no nos gusta comer sin mirar, entre otras cosas porque la visión del alimento estimula el deseo de consumirlo, de tal modo que hemos llegado a crear la expresión “comer con los ojos” para esa situación de apetencia que se traduce en la secreción salivar y en un hacérsenos la boca agua. Los perros de Pavlov sabían mucho de esto.

La trascendenciadel color y el aspecto general de una comida se manifiesta en lo que se refiere tanto a los alimentos frescos como a la presentación de los platos. Ese es el motivo que explica que los escaparates de pastelerías, fruterías, pescaderías y otras tiendas de comestibles se cuiden e iluminen adecuadamente, y que se nos presenten con orgullo orgullo en el restaurante la paella antes de repartirla o el cochinillo y el pavo asados antes de trincharlos. La nueva cocina cuida especialmente el emplatado, de modo que la composición que se forma para presentar al comensal termina siendo una obra de arte en sí misma. Eso sí, hay que reconocer que muchas veces se hace con escaso gusto y menos creatividad.

Estamos acostumbrados a que el color sea un indicador de la calidad de un producto. Los alimentos tienen su color, y nuestra memoria los mantiene asociados, de modo que una desviación al respecto es normalmente motivo de rechazo. El salmón salvaje tiene la carne rosada porque se alimenta de pequeños crustáceos marinos que contienen determinados pigmentos, como la astaxantina y la castaxantina, responsables del color rojo de la mayoría de ellos. Los primeros salmones que se hicieron en piscifactoría eran alimentados con piensos, y su carne resultó de una tonalidad blanca grisácea, lo que fue rechazado por los consumidores. Por ello, en la alimentación de estos peces de cultivo se introducen ahora los citados pigmentos obtenidos sintéticamente, con lo que se logra el color deseado. Está claro; la experiencia del mercado dice que el público prefiere el salmón de color rojizo intenso.

La identificación de colores res con alimentos hace que éstos hayan prestado sus nombres para definir aquéllos, y así decimos amarillo limón, anaranjado, color berenjena, rojo como un tomate, color fresa, verde pistacho y así sucesivamente. Por ello, las verduras nos gustan verdes. Como todos sabemos, ese color se debe a la presencia de clorofila, un pigmento que, entre otras cosas, permite a las plantas realizar la fotosíntesis y elaborar azúcares con dióxido de carbono, agua y la luz del sol. La molécula de clorofila tiene en su centro un átomo de magnesio que puede ser sustituido por un ión hidrógeno si colocamos la verdura en un medio ácido. Si la calentamos durante cierto tiempo, pueden romperse algunas células y liberar ácidos orgánicos, que son los responsables de que se pierda el color verde. Si queremos evitarlo debemos cocer poco tiempo y hacerlo con el recipiente destapado para que se evaporen en parte los ácidos liberados. Así se consigue que los átomos de magnesio sigan en su sitio. Por supuesto, añadir una sustancia que pueda neutralizar los ácidos producidos también funcionaría. Por ello, hay quien sugiere que se agregue una pizca de bicarbonato sódico en la cocción de las verduras, aunque esto afecta al aroma y a la textura, además de destruir la tiamina –vitamina B1–, presente por ejemplo en los guisantes.

El color de los alimentoscrudos se debe, como se ha visto, a la presencia de pigmentos naturales, una categoría en donde además de la clorofila están los carotenoides, que son amarillos, naranjas y rojos-como los citados astaxantina na y castaxatina, o la xantofila–, y son responsables del color de las zanahorias, y las antocianinas, que varían entre el rojo y el azul de las coles lombardas, cerezas, uvas, fresas y manzanas. Otros pigmentos famosos son la hemoglobina de la sangre, la mioglobina de los músculos, o la betanina, propia de la remolacha roja. Los alimentos cocinados deben su color a pigmentos que aparecen por reacciones químicas durante la elaboración, como los dorados de unas patatas fritas.

 Para gustos se pintan colores: Sin duda, se merece un apartado especial la adición intencionada de ingredientes para modificar el color de la comida, como sucede con el azafrán, el colorante natural más utilizado y conocido a nivel popular junto con el pimentón, el aceite de zanahoria, la cúrcuma y el zumo de remolacha. En la industria alimentaria también se usan colorantes extraídos de productos naturales u obtenidos sintéticamente.
Los colorantes sintéticos se reconocen en las etiquetas porque sus códigos están comprendidos entre el E100 y el E180. Para ser aprobados debe garantizarse su inocuidad, estabilidad a la luz, al calor, a la variación de acidez y a la oxidación, que sean prácticamente inodoros, insípidos, estables y que tengan un gran poder de tinción para que se use la menor cantidad posible.
¿Qué efecto causan en el cerebro los logotipos de comida rápida?: Los logotipos de los restaurantes de comida rápida -como McDonalds o KFC- se graban con más intensidad en áreas del cerebro infantil vinculadas a la motivación que otras marcas, según un estudio realizado con ayuda de imágenes obtenidas mediante resonancia magnética que acaba de publicar la revista Social Cognitive and Affective Neuroscience. “Los logotipos relacionados con la comida rápida aumentan la actividad en la corteza cingulada posterior mucho más que cualquier otra marca”, concluyen los autores, dirigidos por Amanda Bruce, de la Universidad de Missouri-Kansas (EE UU). Esta región del cerebro está asociada con el placer, la motivación y con el autocontrol, además de participar en el procesamiento visual-espacial.

A esto se suma que en el experimento los científicos observaron al ver las marcas de alimentos las caras de los críos se iluminaron y su tono de voz cambió. Los hallazgos revelan que los niños son más vulnerables a ciertas acciones de marketing, sobre todo en marcas de comidas y bebidas que se vinculan al bienestar y la felicidad, y que esta activación cerebral desde edades tempranas les impide hacer elecciones saludables respecto a la alimentación cuando los chavales alcanzan la adolescencia, e incluso como adultos.
¿Es malo comer delante de una pantalla?: Comer delante de la pantalla de un videojuego o trabajando con el ordenador puede aumentar nuestro apetito a lo largo del día, según un reciente estudio de la Unidad de Nutrición y Comportamiento de la Escuela de Psicología Experimental de la Universidad de Bristol (Reino Unido).

En el experimento, a la mitad de los participantes se les pidió que jugaran al “Solitario” -un juego de cartas por ordenador-, mientras sus compañeros comían lo mismo pero sin distracciones. Los participantes del primer grupo aseguraron sentirse menos llenos tras el almuerzo, y treinta minutos más tarde tomaron el doble de snacks que sus compañeros. Además, cuando al final de la sesión se les pidió que recordaran qué habían tomado les fallaba la memoria. Los investigadores concluyen que las distracciones mientras comemos pueden provocar un aumento de la cantidad de comida que ingerimos a lo largo del día, algo que ya se había observado en personas que comen mientras ven la televisión. “La memoria y la atención juegan un papel clave en la regulación del apetito y de la cantidad de comida que consumimos”, concluye Jeff Brunstrom, coautor del trabajo publicado en la revista American Journal of Clinical Nutrition.
¿Qué alimentos favorecen la aparición de migraña?: Un mayor consumo en primavera y verano de leche fresca por las mañanas, de frutas como la fresa o la naranja en el postre, de atún en conserva y tomate en las ensaladas, de marisco, o de carne no fresca (conservada durante más de 48 horas en el frigorífico), facilitan la ingesta de cantidades altas de histamina, una molécula que aumenta el riesgo de padecer ataques de migraña, según afirman especialistas del laboratorio DR Healthcare. Algo similar sucede con productos vegetales fermentados, el marisco, el pescado azul, algunos cárnicos crudos curado, como el salchichón o la sobrasada, la leche de vaca, mantequillas, los quesos madurados, como el manchego, el gruyère y el roquefort y la clara de huevo.

Algunos de estos alimentos liberan histamina, mientras que otros provocan la liberación endógena de esta sustancia, con similares efectos.

La histamina está presente en todos los alimentos de la dieta cotidiana y el cuerpo la metaboliza a través de la enzima diaminooxidasa (DAO). Según un estudio realizado por la catedrática en Nutrición y Bromatología de la Universidad de Barcelona Carmen Vidal, el 95 por ciento de los migrañosos estudiados han demostrado tener un déficit de dicha enzima, lo que provoca una acumulación de histamina en el cuerpo que contribuye a desencadenar más ataques de migraña.
¿Qué es la ortorexia?: Si comer sano te obsesiona podrías sufrir ortorexia. Así se denomina el trastorno obsesivo que lleva al extremo la alimentación sana y que consiste en un control exhaustivo y cada vez más estricto de los componentes de los alimentos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la ortorexia afecta, hoy en día, al 28 por ciento de la población de los países occidentales, principalmente a adolescentes y a mujeres. Y según ha explicado el nutricionista y naturópata del Instituto Médico de la Obesidad (IMEO), Rubén Bravo, en declaraciones a Europa Press, su prevalencia "podría ir en aumento" en los próximos años, ya que la sociedad actual "tiende a los extremos" y las personas o se cuidan en exceso o no se cuidan nada  "y tienden a la autodestrucción con la comida como ocurre con la obesidad".

La ortorexia puede comenzar por limitar mucho la alimentación, evitando la ingesta de carne roja, huevos, azúcares, lácteos y grasas, y agravarse hasta conducir al "aislamiento social", ya que el individuo se agobia si por ejemplo tiene que asistir a una comida entre amigos o una comida empresarial. "Estas personas se creen superiores a aquellas que no siguen esta forma de vida", aclara Bravo, y suelen presentar "una falsa autoestima" basada en esta idea de superioridad y en el pleno convencimiento de que su vida es "mejor" que la del resto.

Quienes sufren ortorexia son personas que están "más preocupadas por la calidad de los alimentos que por el placer de comer". Por ello, dedican gran parte de su tiempo (3 o más horas al día) a organizar la dieta y la planifican con mucha antelación, se desplazan grandes distancias para conseguir alimentos especiales o puramente ecológicos, los pesan, analizan sus componentes y abandonan sus actividades diarias para poder llevar a cabo su patológico modo de vida. En el ámbito psicológico, Bravo explica que suelen presentar "niveles altos de dopamina y niveles bajos de serotonina, lo que hace que tengan un exceso de euforia combinado con niveles de ansiedad altos". Y a nivel fisiológico puede suceder tanto que presenten un exceso como que sufran un déficit de vitaminas.
¿Por qué entra sueño después de comer?: Las “caídas del sistema” que sufrimos tras una opípara pitanza pueden ser responsabilidad directa de la glucosa, que hace descender en el hipotálamo los niveles de oxerina, una clase de proteínas cuya misión es mantenernos alerta. El pasado mes de junio, Denis Burdakov y su equipo de investigadores de la Universidad de Manchester, en Inglaterra, demostraron que incluso una subida casi imperceptible de glucosa disminuye sensiblemente la actividad neuronal. Por eso, si quiere seguir despierto deberá evitar las comidas ricas en carbohidratos o grasa; en cambio, mantendrá los ojos bien abiertos tras un banquete de proteínas. Hay, no obstante, voces discrepantes. Según Eduard Estivill, director de la Unidad de Alteraciones del Sueño del Instituto Dexeus de Barcelona, esta sensación de sueño simplemente responde a la necesidad de descansar tras ocho horas de vigilia.
¿Qué comen en su última cena los condenados a pena de muerte?: Hace unos años, el Departamento de Justicia Criminal de Texas (EE UU) realizó un pormenorizado (y en cierto modo macabro) estudio que mostraba que quienes se encuentran en el corredor de la muerte suelen demandar para su última comida hamburguesas dobles con queso, patatas fritas, ensaladas, huevos fritos, enchiladas y jalapeños picantes, además de helados. Las pizzas y el pollo frito también suelen aparecer entre las peticiones. Es decir, principalmente comida rápida, y nada de delicatessen.

Hay otros que se conforman con una lata de pepinillos (Stacey Lawton), un zumo de naranja (John Thompson) o un yogur (James Smith). Y en el polo opuesto se sitúa Gary Carl Simmons Jr., un prisionero de Missisipi condenado a muerte recientemente por desmembrar a un joven de 21 años y violar a su novia, que pidió para su última cena tal cantidad de comida que su contenido calórico era de 29.000 kilocalorías, aproximadamente lo que come una persona normal a lo largo de dos semanas.
Siete cosas que debes saber sobre el desayuno: Decía Francis Bacon que "La esperanza es un buen desayuno pero una mala cena". Pero además de la esperanza, hay otros alimentos que nos sientan especialmente bien si se incluyen en la primera comida del día. Te contamos siete hallazgos científicos que debes tener en cuenta a la hora de desayunar.

No te lo saltes. De acuerdo con un estudio publicado por la Universidad de Tasmanai (Australia) en la revista American Journal of Clinical Nutrition, tanto los niños como los adultos que se saltan la primera comida del día tienden a comer peor y hacer una vida más sedentaria. Además suelen tener niveles de colesterol e insulina más elevados (y por lo tanto más tendencia a sufrir diabetes y cardiopatías) que quienes desayunan.

Menos sobrepeso. Un estudio del Instituto Nacional de Corazón, los Pulmones y la Sangre (EE UU) reveló que las jóvenes que desayunan cereales tienen un índice cintura-altura más bajo, que es el mejor indicador de ausencia de sobrepeso y bajo riesgo cardiovascular. Además, un estudio de la Universidad de Scraton reveló que los cereales de trigo o maíz contienen más antioxidantes que cualquier otro desayuno.

En reunión. Según una encuesta de OnePoll, las reuniones durante el desayuno son más productivas que las reuniones por la tarde. El 67% de los sujetos están más predispuestos a estar atentos durante el desayuno.

El ejercicio, primero. Un reciente estudio de la Universidad de Birmingham publicado en Medicine & Science in Sports & Exercise demostraba que se quema más proporción de grasa cuando nos ejercitamos antes de desayunar. Sin embargo, si desayunamos primero y nos movemos después, los carbohidratos ingeridos (cereales, pan, etc.) interrumpen el metabolismo de la grasa durante al menos 6 horas.

Menos plomo. Un estudio del Environmental Health Journal revelaba que los niños que desayunan a diario tienen menores niveles de plomo en la sangre (un 15% menos) que los que se saltan esta comida.

Si estás a dieta. Los adultos que tratan de perder peso tienen más éxito si toman un desayuno saludable que si lo evitan y consumen algo a media mañana. Por otro lado, un estudio del Centro de Investigación Biomédica Pennington ha revelado que tomar huevos en el desayuno ayuda a perder entre un 60 y un 65% más peso en sujetos que se someten a una dieta de pérdida de peso que cualquier otro desayuno.

Sin desayunar fumas más. De acuerdo con un estudio aparecido en el European Journal of Clinical Investigation que la ausencia del desayuno está asociada, además de con sobrepeso, con una mayor tendencia a fumartabaco, consumir marihuana y beber alcohol.
¿Por qué los conejos se comen sus excrementos?: Aunque parezca una sucia costumbre, la ingesta de los propios excrementos es vital para los conejos, así como para otros animales.

Ahora bien, los conejos nunca comen las heces que expulsa durante el día, que son duras y tienen forma de canica, sino únicamente las que defeca durante la noche. Estas cacas presentan una consistencia más blanda, aparecen agrupadas y cubiertas por un líquido mucoso. A través de su ingesta, el conejo recupera algunas sustancias nutritivas, como la vitamina B y ciertos minerales. Así pues, este comportamiento gastronómico aleja el fantasma de padecer carencias alimentarias y sufrir serios trastornos neurológicos. Por último, hay que añadir que algunos animales, como los perros, no son tan sibaritas, pues consumen cacas incluso de otras especies.

 Bibliografía: Revista muy interesante y datos de internet

lunes, 21 de enero de 2013

TODO SOBRE EL SEXO, QUE NO SABIA


TODO SOBRE EL SEXO, QUE NO SABIA


Dime como andas y te dire como es tu vida sexual: Un estudio de la Universidad Católica de Louvain (Bélgica), reveló hace poco que el modo en que las mujeres caminan puede indicar cuáles tienen orgasmos vaginales en sus relaciones sexuales y cuáles no. Según los autores del trabajo, además de tener un impacto positivo en la salud mental femenina, los orgasmos vaginales durante el coito relajan ciertos músculos del cuerpo femenino que permite a las mujeres caminar de forma distinta, con un paso más fluído y energético, más sensual, sin músculos bloqueados, más libre, según concluyen los autores.
En sus experimentos comprobaron que, observando vídeos de mujeres caminando por la calle, los sexólogos podían deducir si habían experimentado o no orgasmos con un 81,25% de acierto. La investigación corrobora que la musculatura tiene efectos importantes sobre la función sexual, así como que el orgasmo vaginal es muy diferente del que causa la estimulación del clítoris. Todo ello podría tener implicaciones para la terapia sexual, según concluyen los autores en la revista The Journal of Sexual Medicine.
Quien tiene más fantasías sexuales: Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Granada ha demostrado que no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales que experimentan habitualmente los hombres y las mujeres, ya que ambos sexos fantasean con aspectos íntimos o románticos que involucran a la pareja o persona amada. Para llevar a cabo esta investigación, sus autores trabajaron con una muestra formada por 2.250 españoles (49,6% hombres y 50,4% mujeres), con edades comprendidas entre 18 y 73 años y que habían mantenido una relación de pareja heterosexual durante, al menos, los últimos seis meses.
Los resultados obtenidos indican que casi el 100% de hombres y mujeres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable a lo largo de su vida, y en torno el 80% de la muestra encuestada informa haber experimentado, al menos, una fantasía sexual de forma negativa o desagradable en algún momento.
Sin embargo, existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos. En concreto, los científicos observaron que las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, teniendo estos pensamientos aproximadamente algunas veces al mes. Sin embargo, los hombres piensan con mayor frecuencia que ellas en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o búsqueda de nuevas sensaciones, como “ser promiscuo”, “intercambio de parejas” o “participar en una orgía”. La frecuencia de estas fantasías van desde “alguna vez en la vida” a “alguna vez al año”.
Los investigadores de la Universidad de Granada advierten de que tener fantasías sexuales “favorece aspectos como el deseo o la excitación sexual, por lo que es un indicador de salud sexual”. En el marco de la terapia, afirman que es necesario tener en cuenta, además de la presencia o ausencia de las fantasías, la actitud que presenta el paciente hacia estas.
5 cosas que aumentan el deseo sexual en mujeres: Según Meredith Chivers, de la Universidad de Queens (Canadá), para mantener relaciones sexuales es fundamental “estimular el cerebro de las mujeres”. Médicos, neurocientíficos y psicólogos han identificado en la última década algunos trucos que ayudan a despertar el deseo femenino.
Chocolate
De acuerdo con un estudio publicado en la revista The Journal of Sexual Medicine, las mujeres que toman al menos una pastilla de chocolate negro al día experimentan mayor deseo sexual y tienen relaciones sexuales más placenteras. Y lo que es más interesante: funciona a cualquier edad.
Yoga
Practicar regularmente yoga no sólo reduce el estrés y la inflamación. Científicos de la Escuela Médica de Harvard (EE UU) han comprobado que la repetición de las posturas o “asanas” propias de esta actividad durante al menos doce semanas consigue aumentar el deseo, la excitación, la lubricación y el número de orgasmos en mujeres de 22 a 55 años.
Colesterol a raya
Katherine Esposito y sus colegas de la Seconda Universitá degli Studi de Nápoles (Italia) han demostrado que las mujeres con niveles altos de colesterol y otras grasas en sangre experimentan un importante descenso de la excitación, el orgasmo y el deseo. Por su parte, Annamaria Veronelli, de la Universidad de Milán, ha relacionado los problemas de disfunción sexual femenina con diabetes, obesidad y baja actividad de la glándula tiroides.
Inteligencia
En un experimento con más de mil parejas de hermanas gemelas, científicos del King’s College de Londres demostraron que las mujeres con más inteligencia emocional -habilidad para gestionar los sentimientos propios y ajenos- tienen el doble de orgasmos que el resto de las féminas. Según Tim Spector, coautor del estudio, a raíz de los resultados no cabe duda de que “la inteligencia es una ventaja incluso en la cama”.
Una copa de vino
Hace un par de años, investigadores de la Universidad de Florencia (Italia) reclutaron a 800 mujeres de 18 a 50 años de edad para estudiar si beber vino tinto tenía algún efecto sobre la libido femenina. Los experimentos, de los que se hizo eco la revista Journal of Sexual Medicine, revelaron que consumir una o dos copas de vino al día aumenta el deseo sexual. Los científicos sugieren que se debe a que los antioxidantes de esta bebida aumentan el flujo sanguíneo en zonas claves del organismo.
El rostro de las mujeres se calienta charlando con el sexo opuesto: Investigadores de la Universidad St Andrews (Reino Unido) han demostrado que las interacciones sociales no sexuales entre hombres y mujeres hacen que la temperatura de la cara de las mujeres aumente considerablemente. Para llegar a esta conclusión, los científicos emplearon imágenes térmicas para registrar la temperatura de la piel en los brazos, las palmas de la mano, la cara y el pecho de los interlocutores. Y detectaron que en las interacciones entre ambos sexos había una respuesta fisiológica al contacto social mucho más intensa de lo que imaginaban, ya que la temperatura facial en las mujeres aumentaba un grado centígrado, a pesar de que no existía sensación de rubor por parte de los participantes. Sin embargo, en interacciones similares entre dos mujeres no se producía ningún cambio de temperatura, según desvelan los autores en el último número de la revista Biology Letters.
Los investigadores tratarán ahora de determinar si esta respuesta fisiológica es detectada por los demás y si afecta de algún modo a las interacciones sociales. “Estamos explorando la relación entre variaciones en la temperatura de la piel y el color de la piel, que debería ser ligeramente más roja al aumentar el flujo de sangre”, explica Carmen Lefevre, coautora del estudio, que sospecha que esos cambios podrían ser detectados inconscientemente en la conversación y afectar a la percepción del atractivo físico, cumpliendo así una función biológica.
¿Se puede hacer el amor dormido?: Según el psicólogo estadounidense Michael Mangan, el llamado sexsomnio es más común de lo que se cree, de tal manera que incluso se ha creado un foro en internet –sleepsex.org– donde se invita a los afectados por este extraño comportamiento a que cuenten sus experiencias. Una mujer, por ejemplo, intentaba mantener relaciones sexuales con su pareja y acto seguido se despertaba y le acusaba de intentar violarla. Otra internauta explica que su marido es sexsonámbulo y que no le importa, salvo por el molesto hecho de que empezaba a roncar tras el coito. En el mismo foro, una afectada dice sentirse engañada porque su esposo se masturba sin darse cuenta todas las noches. Cuando pone en peligro la relación, este trastorno del sueño se puede tratar fácilmente con medicamentos.
A más sexo menos estrés: Cuanto más sexo practicamos, más bajos son los niveles de estrés del organismo. Así se desprende de un reciente estudio llevado a cabo por Benedetta Leuner y sus colegas del Instituto de Neurociencia de la Universidad de Princeton (EE UU) del que se hacía eco la revista científica PLoS One.
En una serie de experimentos, Leuner y su equipo demostraron que si bien una experiencia sexual aislada causa un aumento a corto plazo en el nivel de cortisol (la hormona del estrés) en roedores, tal y como ocurre tras el ejercicio físico, múltiples experiencias sexuales a diario durante un período de dos semanas consiguen reducir drásticamente la liberación de cortisol. A este efecto anti-estrés se suma que practicar sexo asiduamente aumenta la neurogénesis (formación de nuevas neuronas) y el número de conexiones entre células nerviosas, además de reducir drásticamente los niveles de ansiedad.
Por que los hombres se duermen después del sexo: Según demostró recientemente el neurocientífico francés Serge Stolerú tras escanear el cerebro de varios hombres antes y durante un orgasmo, en la materia gris masculina existen dos áreas, la corteza cingulada y la amígdala, que dan la orden al resto del cerebro de desactivar cualquier sensación de deseo inmediatamente después mantener una relación sexual. Esto se acompaña de la secreción masiva de dos sustancias químicas, la oxitocina y la serotonina, que inducen un profundo sueño, según explicaba Stolerú en la revista Neuroscience and Biobehavioral Reviews. Tanto es así que una reciente encuesta llevada a cabo en Europa entre 10.000 adultos puso de manifiesto que el 80% de los hombres se duermen profundamente tras practicar sexo, e incluso que un 48% admite que se ha quedado dormido alguna vez durante el acto.
A las mujeres no les ocurre lo mismo, lo que explica por qué privadas de atención después de mantener relaciones sexuales con sus parejas, tal y como concluía un reciente estudio de la Universidad de Michigan (EE UU).
Como diagnosticar a un adicto al sexo: Aunque se pueda bromear con el término, la adicción al sexo es un problema psicológico que puede traer graves consecuencias sobre la vida y relaciones sociales de quienes la padecen. Por eso, un equipo de psicólogos y psiquiatras de la Universidad de California han formulado una lista de criterios para diagnosticar el llamado `desorden hipersexual' como un tipo más de trastorno de la salud mental.
Algunos de los síntomas que reúnen los adictos al sexo incluyen un patrón repetido de fantasías sexuales y el recurrir a la actividad sexual en respuesta a estados de ánimo desagradables como el estrés o la depresión. Además, estos individuos no consiguen tener éxito en sus intentos de reducir o frenar su actividad sexual cuando se dan cuenta de que esta es problemática. "Mucha gente usa el sexo de vez en cuando para escapar del estrés, esto es algo normal. El problema es que para estos pacientes se trata de una conducta constante, que se intensifica hasta tal punto que el deseo sexual controla todos los aspectos de sus vidas, y además se sienten impotentes en sus esfuerzos por cambiarla", explica Rory Reid, uno de los autores del trabajo, que se publica en la revista Journal of Sexual Medicine.
Los investigadores comprobaron la eficacia de sus criterios a la hora de diagnosticar adicciones sexuales en más de 200 personas con distintos problemas de salud mental, y consiguieron diagnosticar correctamente al 88 por ciento de los pacientes. Además, encontraron que la mayoría de individuos con desorden hipersexual sufrían las consecuencias de su enfermedad: el 17 por ciento había perdido su empleo al menos una vez, el 39 por ciento había finalizado una relación sentimental y el 28 por ciento había contraído alguna enfermedad de transmisión sexual. "Las personas que manifiestan los síntomas de la enfermedad experimentan las secuelas en su vida diaria", explica Reid. La conducta hipersexual se relaciona con una mayor perturbación emocional, impulsividad e incapacidad para manejar el estrés".
Los resultados también revelaron que el 54 por ciento de los afectados se habían dado cuenta de tener una conducta sexual anormal antes de los 18 años, y un 30 por ciento lo había constatado durante la época universitaria, entre los 18 y 25 años. Además, las conductas más repetidas entre los pacientes incluían la masturbación y uso excesivo de pornografía, seguidas del sexo consentido y el cibersexo. Estas personas tenían relaciones con trabajadoras sexuales y repetidos encuentros con parejas anónimas, con una media de 15 compañeros sexuales en los últimos 12 meses.
Los autores pretenden incluir el desorden hipersexual en la próxima edición del Manual de Diagnóstico y Estadística de los Desórdenes Mentales (DSM-5), considerado como la `biblia' de la psiquiatría.
La dilatación de tus pupilas revela tu orientación sexual: Existe la creencia popular de que la orientación sexual de una persona se puede detectar por la dilatación que experimentan sus pupilas cuando ven a un individuo atractivo. Por primera vez, investigadores de la Universidad de Cornell han tratado de averiguar si esta idea tiene alguna base científica. Usando lentes infrarrojas para medir los cambios pupilares que se producen en personas heterosexuales, homosexuales y bisexuales mientras visualizan vídeos eróticos, han demostrado que la orientación sexual se puede “adivinar” por el comportamiento de la pupila. Sus conclusiones se publican en la revista PLoS ONE.
Según los autores del estudio, la ventaja de esta tecnología es que se puede explorar la orientación sexual de una forma no invasiva. En los experimentos, los hombres heterosexuales mostraron una fuerte respuesta pupilar a los videos sexuales de mujeres, y apenas ninguna cuando los protagonistas eran hombres. Sin embargo, las mujeres heterosexuales mostraron respuestas pupilares ante ambos sexos, confirmando así que la sexualidad femenina es diferente a la masculina. En el caso de los hombres bisexuales sí se observó que las pupilas aumentaban de tamaño ante escenas protagonizadas tanto por hombres como por mujeres. Y las pupilas de los varones declarados homosexuales se dilataban mucho más que la de sus compañeros heterosexuales ante las imágenes eróticas de otras personas del mismo sexo.
Según los científicos, los resultados muestran que no existe una separación tan tajante como se suele pensar entre “hetero”, “homo” y “bi”. Cuando se trata de sexualidad humana, se debería hablar de “mayoritariamente heterosexual a mayoritariamente gay”, afirma Ritch C. Savin-Williams, coautor del trabajo. Según su interpretación, "las diferentes sexualidades se inscribirían más bien dentro de un rango", concluyen los autores.
Fumar afecta el deseo sexual: "Fumar puede dañar el esperma y reduce la fertilidad" "Fumar obstruye las arterias y provoca cardiopatías y accidentes cerebrovasculares" "Fumar puede matar" "Fumar puede dañar sus relaciones de pareja y aumentar su deseo sexual". Las tres primeras frases aparecen en los paquetes de tabaco para persuadir a los fumadores de dejar este nocivo hábito. La cuarta no aparece pero podría aparecer, según un nuevo estudio alemán.
La nicotina y el fumar en sí mismo afecta a múltiples facetas del cuerpo humano. Es más que evidente que daña a los pulmones, afecta a las arterias e incluso a la calidad del esperma sin embargo ahí no queda todo. La doctora Wiebke Neberich, doctora en psicología de las relaciones personales por la Universidad Humboldt de Berlín, ha estudiado el apetito sexual , la personalidad y las relaciones de los solteros españoles a través del portal de búsqueda de pareja eDarling.
El análisis ha dejado varios resultados curiosos. Por un lado las personas solteras son más sociables y aventureras, al confesar el 60 por ciento de los no fumadores preferir una vida tranquila y sin resaltos. A este respecto la Neberich afirma que " los fumadores disfrutan más de la comunicación con otras personas y estar rodeados de gente, les produce placer mientras fuman".
Otro de los resultados derivados del estudio ha sido las diferencias de deseo sexual entre fumadores y no fumadores. La cantidad de personas fumadoras con un "gran deseo sexual" está tres puntos por encima que los no fumadores, lo que Neberich explica diciendo que "son personas más hedonistas y más orientadas a obtener placer". Además, apunta la investigadora, "poseen un menor nivel de frustración y son estrategas a corto plazo, disfrutando del momento y no de las consecuencias a largo plazo. Por consiguiente ellos perciben las necesidades sexuales de una manera más intensa y fuerte". Respecto a la duración de estas relaciones la investigadora también se muestra tajante: "[los fumadores] no planean a largo plazo, lo que puede conllevar a tomar decisiones más arriesgadas e impulsivas, y por tanto, tener una vida sexual más activa".
¿Aceptarías que tu pareja fumase?
Finalmente la científica analizó los gustos de las personas respecto al tabaco y, sorprendentemente, tanto fumadores como no fumadores pensaban parecido. Solo el 3,86 por ciento de los fumadores aceptaría sin problemas que su pareja fuera un fumador habitual, mientras que los solteros no fumadores aceptarían como máximo que su pareja fumara un cigarrillo a la semana.
Según este estudio y cruzándolo con los resultados sobre tabaco y autoestima publicados recientemente por la doctora Wiebke Neberich, y que concluian que los fumadores tienen la autoestima más baja y sufren más ansiedad, el cóctel es poco halagüeño para los fumadores. "Esta inseguridad combinada con una personalidad más aventurera y un mayor deseo sexual les hace proclives a optar por una relación esporádica y no duradera", apuntan desde eDarling
De los casi 3.500 personas solteras estudiadas por la doctora Neberich, 1.813 eran hombres y 1.685 eran mujeres, con una media de edad de 35 años.
Como nos hace felices el sexo: Las relaciones sexuales nos hacen felices, nos cambian la cara y mejoran nuestra capacidad respiratoria y muscular. ¿Cómo lo consiguen? En atractivas.es nos explican los mecanismos que consiguen sobre todo a través de la liberación de las conocidas como hormonas de la felicidad, las endorfinas.
Y es que este tipo de sustancias que libera nuestro cuerpo en ciertas ocasiones es básica en nuestro estado de ánimo. Tanto es así que incluso son capaces de funcionar como un analgésico, aliviando el dolor, según demostró recientemente un equipo de investigadores de la Universidad de Oxford liderado por Robin Dunbar. Igualmente, explican desde atractivas.es , practicar deporte al aire libre y "sobre todo por la mañana", libera endorfinas, lo que ayuda a superar el estrés.
Lo mismo ocurre cuando practicamos sexo, pues durante el coito se liberan una gran cantidad de hormonas. La mujer libera oxitocinas (conocida como "molécula del amor" y serotoninas que influyen en el estado de ánimo para posteriormente liberar endorfinas que, según esta web especialista en el cuidado del cuerpo y de un estilo de vida más saludable, "crea una sensación de placer y un estado de euforia, que alcanzan el nivel máximo en el orgasmo".
Sin embargo hay que tener cuidado, el ejercicio físico puede llegar a ser adictivo. Como explica el profesor Robin Kanarek de la universidad de Tufts, "el ejercicio, como el abuso de drogas, hace que se liberen en exceso neurotransmisores como las endorfinas o la dopamina, ligados a la sensación de recompensa".
Cuantas veces pensamos al dia en sexo: ¿Es cierto que los hombres piensan en sexo más veces al día que las mujeres? Según se desprende de un estudio de la Universidad Estatal de Ohio (EE UU) dirigido por Terri Fisher, sí, aunque no tanto como solemos pensar. Concretamente, en una investigación con 300 sujetos de ambos sexos, Fisher ha calculado que la mayoría de los hombres tienen 19 pensamientos sexuales al día, aunque algunos llegan a alcanzar la friolera cantidad 388. Por término medio, una mujer piensa en sexo 10 veces al día, y la que más pensamientos registra suma 140 veces en 14 horas. Los detalles de la investigación se publicarán en el próximo número de la revista The Journal of Sex Research.
En el estudio, Fischer también ha demostrado que los hombres también piensan más en otras necesidades básicas, como la comida y el sueño, que las mujeres.
El sexo nos `puede matar: Los súbitos aumentos de actividad física moderada a intensa, como correr o mantener relaciones sexuales, incrementan de modo significativo el riesgo de sufrir un ataque al corazón, especialmente en personas que no realizan ejercicio regular, según un reciente estudio publicado en la revista Journal of the American Medical Association.
Los médicos han sabido durante mucho tiempo que la actividad física puede causar serios problemas cardíacos, pero la nueva investigación ayuda a cuantificar ese riesgo, según ha explicado el doctor Issa Dahabreh de Tufts Medical Center en Boston. Su equipo analizó datos de 14 estudios examinando el vínculo entre el ejercicio, el sexo y el riesgo de ataques al corazón o muerte cardíaca súbita, un ritmo mortal del corazón que hace que la sangre deje de circular.
Los investigadores hallaron que las personas son 3,5 veces más propensas a sufrir un ataque cardíaco o una muerte súbita de origen cardíaco cuando se están ejercitando comparado con los momentos en que no lo están haciendo. Y son 2,7 veces más propensos a sufrir un ataque al corazón cuando practican sexo o inmediatamente después, comparado con los momentos en que no lo practican. "Estos riesgos se elevan sólo por un breve período de tiempo (1 a 2 horas) durante y después de la actividad física o sexual", explica Jessica Paulus, coautora del estudio. Y se pueden minimizar si el esfuerzo se realiza de forma gradual.
El sexo oral aumenta el riesgo de cáncer: El contagio del virus del papiloma humano (VPH) a través del sexo oral es actualmente la principal causa de cáncer orofaríngeo, es decir, de tumores que se originan en la parte trasera de la lengua, el paladar, las amígdalas o la garganta. Así se deduce de un estudio financiado por el Instituto Nacional del Cáncer de EE UU y publicado en el último número de la revista Journal of Clinical Oncology.
Según han comprobado Maura Gillison y sus colegas de la Universidad Estatal de Ohio (EE UU), la infección con el virus del papiloma humano (VPH), un virus de transmisión sexual, ha superado como causante de cáncer oral al tabaco y el alcohol, dos de los factores de riesgo históricamente asociados con esa enfermedad. En concreto, el número de personas a las que se les diagnosticó cáncer oral vinculado al VPH en el 2004 fue el triple que las diagnosticadas en 1988. Esto se debe sobre todo, según sospechan los investigadores, a cambios en el comportamiento sexual que ayudaron a extender el virus.
El VPH es un virus de transmisión sexual muy común, que puede causar verrugas genitales y ciertos tipos de cáncer, incluido el de cérvix o cuello de útero, ano y pene. “La relación entre el VPH y el cáncer de cabeza y cuello cambia totalmente nuestra idea de quién está en riesgo, cómo tratar el cáncer, su pronóstico y la prevención”, indican los autores de la investigación.
La buena noticia, dice Gillison, es que existe una vacuna contra el VPH, que está aprobada para prevenir el cáncer cervical y anal. Si la vacuna puede prevenir estos cáncer causados por el VPH en la zona genital, quizá pueda funcionar también para los cánceres orofaríngeos.
Los humanos malinterpretamos las señales del sexo opuesto: Normalmente los seres humanos malinterpretamos las señales o "pistas" sexuales que nos envía el sexo opuesto. Al menos eso es lo que se desprende de una nueva investigación estadounidense. “Hay muchos estudios que muestran que los hombres habitualmente piensan que las mujeres están interesadas en ellos cuando realmente no lo están”, explica Carin Perilloux, del Wiliams College de Massachusetts (EE UU), coautora del estudio. “El nuestro es el primero en examinar de forma sistemática las diferencias individuales”, añade.
En un experiento de citas rápidas, los investigadores comprobaron que los hombres tienden a sobreestimar el efecto positivo que causan en las mujeres, y suelen pensar que las mujeres se sienten atraídas por ellos aunque no sea cierto. Curiosamente, cuanto más atractiva es una mujer, más sobreestiman los hombres su interés sexual hacia ellos. Las mujeres, por el contrario, tienden a infravalorar la atracción que causan en el sexo opuesto.
Desde el punto de vista evolutivo, explican los autores en un artículo publicado en la revista Psychological Science, estos supuestos “errores” mejoran el éxito reproductivo en los hombres. En otras palabras, los hombres que “van a por todas”, incluso ante el riesgo de ser rechazados, tienen más probabilidades de "conseguir a la chica", concluyen.
Influye el sexo a la hora de cooperar: El Espacio Zaragoza Activa acogió el mayor experimento a tiempo real sobre cooperación en sociedad que se ha realizado hasta ahora: El Dilema del Prisionero.
Los participantes en este experimento on-line fueron más de mil alumnos de bachillerato de diferentes institutos de Aragón, que tuvieron que resolver el famoso "Dilema del Prisionero". Este problema de conflicto social pone de manifiesto que el mayor beneficio para las personas que interaccionan se produce cuando ambas colaboran, pero, si una colabora y otra no, ésta última tiene más beneficio. Esto, en ocasiones, activa la posibilidad de aprovecharse de la colaboración de los demás. Pero, si esta tendencia se extiende, al final, nadie coopera y, por tanto, nadie obtiene beneficios.
Las chicas cooperan más
Como resultado preliminar, se ha comprobado que las chicas han colaborado un diez por ciento más que los chicos. Además, el tipo de bachillerato que se esté estudiando también marca la diferencia: el nivel de cooperación de los estudiantes de los bachilleratos en Humanidades y Ciencias de la Salud supera en un cuatro por ciento al Científico Tecnológico. Sin embargo, otros parámetros como la procedencia geográfica o el número de miembros de la familia parecen no influir en el comportamiento. De forma general, aproximadamente uno de cada tres alumnos ha cooperado.
Por otro lado, en un estudio previo realizado por la Universidad Carlos III se concluyó que nunca se alcanza una situación en la que la mayoría de la gente coopere. Esto de debe a que muchas personas lo hacen en función de su estado de ánimo o de la decisión de sus vecinos.
El experimento, organizado por la Universidad de Zaragoza, la Fundación Ibercivis y la Universidad Carlos III de Madrid, supone el mayor realizado hasta el momento a gran escala y en tiempo real.
tomar café, sonarse la nariz y practicar sexo aumentan el riesgo de derrame cerebral: Un estudio médico de la Universidad de Utrecht, en Holanda, ha identificado ocho factores que aumentan el riesgo de derrame cerebral debido a la ruptura de un aneurisma. El primer puesto de la lista lo ocupa el consumo del café, al que se atribuye el 10,6% de las hemorragias, según publica la revista Journal of the American Heart Association. Le siguen hacer ejercicios físicos pesados (7,9%), sonarse la nariz (5,4%) y practicar sexo (4,3%). Hacer esfuerzos para defecar, asustarse, consumir refrescos de cola y enojarse completan la lista de causas. Según los investigadores, que han estudiado a 250 pacientes durante 3 años, cada uno de estos factores causan un aumento súbito de la presión arterial, lo que supone un riesgo muy conocido de accidentes cerebrovasculares.
Este estudio solo analiza los factores que llevan a la ruptura de un aneurisma, pero no sus causas. Se calcula que una de cada 50 personas tiene un aneurisma cerebral, pero no todos llegan a estallar. Todo apunta a que la hipertensión ocasionada por el exceso de peso, el tabaquismo y el sedentarismo debilitan las paredes de las arterias.
El sexo diario mejora la calidad del esperma: Mantener relaciones sexuales todos los días mejora la calidad del esperma e incrementa las posibilidades de embarazo, revela un estudio australiano. La investigación, realizada por el David Greening del centro de fertilización in vitro Sydney IVF, fue presentada durante la conferencia de la Sociedad Europea de Reproducción y Embriología Humanas que se celebra en Amsterdam (Holanda).
Según Greening, ocho de cada diez hombres con problemas de fertilidad que participaron en el estudio mostraron una reducción del 12% en el daño al ADN de su esperma tras una semana de actividad sexual. Además, los espermatozoides también se volvieron más activos transcurridos los siete días, experimentando un pequeño aumento en la motilidad. El investigador sostiene la teoría de que cuanto más tiempo pasa el esperma almacenado en los testículos, más probabilidades existen de que acumule daño en el ADN, atacado por radicales libres.
Como conclusión de su estudio, Greening recomienda que si las parejas están intentando concebir de forma natural, las relaciones sexuales cada uno o dos días podrían asegurar que los espermatozoides se mantienen lo más sanos posible. Eso sí, esta asiduidad sólo es recomendable inmediatamente antes y mientras la mujer está ovulando, ya que tener sexo diariamente durante más de dos semanas quizás podría reducir demasiado el volumen de esperma, añade el experto.
5 cosas que debes saber sobre las cefaleas y el sexo: 1. Según la Sociedad Española de Neurología (SEN), en raras ocasiones la actividad sexual por sí misma puede desencadenar dolor de cabeza sin que exista ninguna causa aparente que lo justifique. Según datos manejados por la SEN, este fenómeno puede ocurrir en algún momento de la vida hasta en un 1% de la población.

2. Las cefaleas primarias relacionadas con la actividad sexual afectan en el 80% de los casos a hombres. En un 75% de las ocasiones se trata de cefaleas orgásmicas, caracterizadas por ser dolores de cabeza muy intensos y repentinos que ocurren justo durante el orgasmo, mientras que un 25% corresponden a cefaleas preorgásmicas, identificables por un dolor sordo en la cabeza y el cuello asociado a contracción de los músculos del cuello o la mandíbula, que se desarrolla gradualmente durante la actividad sexual y aumenta con la excitación.

3. La duración media de las cefaleas preorgásmicas y orgásmicas puede variar desde solo 1 minuto hasta 3 horas, aunque puede quedar cierto dolor residual leve durante varias horas más.

4. Según un reciente estudio de la Escuela Universitaria de Medicina Wake Forest, las personas que sufren migraña tienen más niveles de deseo sexual que quienes padecen otros tipos de cefalea. Al parecer la relación es que ambos fenómenos -la migraña y el deseo sexual- están ligados a bajos niveles de serotonina.

5. Muchos de los fármacos habitualmente usados en migraña y otras cefaleas pueden afectan negativamente a la función sexual y por ende a la calidad de la vida sexual. De acuerdo con un trabajo que la SEN coordinó hace unos años, al menos un 20% de los pacientes en tratamiento por migrañas refería una clara disminución del deseo sexual y hasta un 45% de los mismos aseguraba haber padecido algún trastorno sexual relacionado con la medicación en alguna ocasión.
Las respuestas del cerebro al sexo y al dinero son diferentes: Regiones diferentes del cerebro responden a placeres secundarios como el dinero o primarios como el sexo, de acuerdo con un nuevo estudio del Centro Nacional de Investigación Científica de Francia (CNRS).
Para llegar a esas conclusiones, los investigadores Jean-Claude Dreher y Guillaume Sescousse les propusieron a 18 voluntarios prestarse para un ejercicio en forma de juego que permitía o bien ganar dinero o bien ver imágenes eróticas mientras eran sometidos a un escáner de resonancia magnética funcional. Los experimentos mostraron que ambos estímulos activan zonas diferentes de la corteza orbitofrontal, una región cerebral situada justo detrás de los ojos. La parte posterior de la corteza es movilizada por las recompensas que responden a necesidades primarias como comer, beber o tener relaciones sexuales, más antiguas en la evolución. La parte anterior, sin embargo, se pone en marcha con los llamados placeres secundarios, como el dinero y el poder, propios del ser humano, según publica hoy la revista The Journal of Neuroscience. La disociación es mayor cuanto más abstractas y complejas son las satisfacciones.
Los autores consideraron que el estudio permitirá una mejor comprensión de algunas enfermedades psiquiátricas, en particular la adicción al juego (ludopatía), y contribuirá a la comprensión de las redes neuronales implicadas en la motivación y el aprendizaje.
El sobrepeso causa problemas sexuales: Las personas con sobrepeso tienen el doble de riesgo de presentar disfunción eréctil, y los sujetos obesos son 25 veces más propensos a sufrir problemas sexuales que aquellos que tienen un peso normal, según ha anunciado el Instituto de Medicina Sexual. El dato es preocupante teniendo en cuenta que, de acuerdo con la última Encuesta Europea de Salud 2009, unos seis millones de españoles mayores de 18 años (17 por ciento) tienen problemas de obesidad, casi un dos por ciento más que en 2008; y un 36,6 por ciento sobrepeso, un uno por ciento más que el año anterior.
"Disponemos de múltiples evidencias de que los pacientes que sufren problemas de peso desarrollan dificultades considerables que afectan no sólo a la comunicación con sus parejas, en lo relativo a sentimientos y necesidades, sino también a una mayor o menor satisfacción posterior a las relaciones sexuales", ha explicado el doctor Mariano Rosselló, director del Centro de Urología, Andrología y Salud Sexual.
El experto señala que el sobrepeso afecta a la autoestima y al deseo sexual, pero lo hace de manera diferente en hombres y mujeres, de modo que los varones son más propensos a sufrir de impotencia sexual y las féminas de falta de deseo, de inhibición de la líbido.
Los datos se han dado a conocer con motivo de la Semana Europea de la Salud Sexual, que se celebra del 8 al 14 de febrero.
El sexo y la agresividad están ligado al cerebro: El sexo y la violencia están interconectados en el cerebro de los ratones. La actividad de un pequeño grupo de neuronas situadas en la región del hipotálamo ventromedial (VHM por sus siglas en inglés) del cerebro de los machos determina si se inicia una pelea o se mantienen relaciones sexuales, y hay buenos motivos para pensar que los seres humanos poseen un circuito similar, según sugiere un estudio publicado en la revista científica Nature.
En concreto, David Anderson, del Instituto de Tecnología de California (Caltech), y sus colegas han identificado que una parte de las neuronas de este núcleo se activa sólo en caso de agresión y otras se activan sólo en caso de apareamiento, pero hay cerca de un 25% que se activa en ambas situaciones.
Implantando fibra óptica en el cerebro de los roedores, los investigadores consiguieron modificar artificialmente la actividad de estas redes neuronales a su antojo. De este modo pudieron comprobar que mientras el circuito de la agresividad se mantenía inactivo, los ratones ignoraban la presencia de machos intrusos a los que de forma natural atacarían, eliminando prácticamente el comportamiento violento. Por el contrario, cuando las neuronas se activaban a destiempo, los ratones se volvían tan agresivos que atacaban incluso a objetos inanimados como un guante inflado, a machos castrados o a hembras a las que antes intentaban cortejar. Sin embargo, si estas mismas neuronas se activaban mientras el animal estaba ya inmerso en una actividad sexual, no aparecían conductas violentas. Las neuronas analizadas, concluyen los científicos, se activan en conductas agresivas y se inhiben durante el apareamiento.
Según Anderson, de este estudio podría deducirse que una conexión disfuncional en estas áreas del cerebro podría explicar por qué algunos individuos tienen impulsos sexuales y violentos no apropiados.
El sexo de pie reduce el riesgo de embarazo: En principio no existen posturas que dificulten o favorezcan la concepción. Para que ocurra la fecundación, los espermatozoides tienen que alcanzar las trompas de Falopio, un viaje que se completa sea cual sea la posición usada en el coito.
La sabiduría popular forjó el mito de que si se practica el sexo de pie, los espermatozoides lo tienen más difícil para alcanzar el óvulo, ya que deben vencer la fuerza de la gravedad. No hay estudios fiables que correlacionen esta hipótesis, aunque algunos antropólogos sugieren que el orgasmo femenino se "inventó" precisamente para que la mujer exhausta  permaneciera tumbada y retuviera el semen.
¿Por qué a ellos les excita el sexo lésbico?: A nivel sexual, se supone que el hombre da más importancia a los estímulos visuales y la mujer, al ambiente erótico. También se dice que a ellos les estimula por igual la visión de un revolcón heterosexual y el de dos mujeres, aunque para muchos científicos esta reacción encierra un potente componente cultural. Hay experimentos que revelan que ambos sexos se excitan casi de la misma forma al contemplar un acto libidinoso. Algunos estudios van más allá y revelan que el grado de erotización masculina es similar ante cualquier encuentro erótico, incluido el de dos hombres.
El científico David Loftus, autor de Watching Sex, midió la reacción química y muscular de varios voluntarios ante distintas imágenes pornográficas y concluyó que nada tenía que ver con la identificación sexual de los sujetos observados. De hecho, los hombres heterosexuales se sentían muy excitados ante las relaciones entre gays.
Que es la sexomnia: Se denomina así a cualquier comportamiento sexual que se produce estando dormido. Pese a que no hay estadísticas, existen algunos casos documentados. En 2004, el médico australiano Peter Buchanan relató el episodio de una paciente que, aunque tenía pareja estable, se iba de casa sonámbula y mantenía relaciones con extraños. Y en 2005 salió en la prensa el caso de un hombre que fue procesado por violar a la mujer con la que dormía. Su defensa alegó que padecía trastornos del sueño y sonambulismo agudo, y la sentencia contempló la sexomnia como atenuante.
A veces, los compañeros de cama de los sexomnes optan por dormir separados para no ser molestados, aunque algunos han confesado que el sexo con su pareja dormida es mejor que cuando está despierta. En todo caso, se empieza a considerar un trastorno serio entre cuyas causas se barajan la epilepsia y el consumo de drogas y alcohol.
Amor platónico significa sin sexo: Este tipo de sentimiento, en el que prima la atracción espiritual sobre la sensual, toma su nombre de las ideas de Platón. En sus Diálogos, el filósofo definió una emoción basada en el amor a la belleza que, según él, surge entre un hombre y un muchacho. Para los neoplatónicos renacentistas, el amor ideal sólo se siente tras comprender que la belleza es más perfecta cuanto más se aparta de la materia corruptible. Y hoy se entiende por amor platónico la relación en la que las circunstancias impiden practicar sexo, pero este está presente, aunque sólo sea en las fantasías eróticas de una de las partes.
Que es el sexo tantrico: Es una forma de realizar el acto sexual basada en el Tantra, que en sánscrito quiere decir red o secreto. Se trata de un conjunto de textos y rituales religiosos esotéricos budistas e hindúes en los que el dios Shiva explica la filosofía del ritual tántrico. Éste incluye la práctica del sexo consciente como camino para potenciar la sensibilidad humana y focalizar toda la energía en una satisfacción mutua.
 Este saber milenario, originario de los dravídicos, antiguos habitantes del valle del Indo, maneja la denominada energía sexual del individuo para alcanzar el éxtasis. El tantrismo utiliza una serie de técnicas para prolongar el placer sexual (bhoga) y retardar el orgasmo, lo que lo convierte en muy atractivo para Occidente, donde el sexo, muy orientado al placer masculino, se ha convertido en un deporte a contrarreloj.
 En la filosofía tántrica,  no hay superioridad de un sexo y no hace distinción entre lo puro y lo  impuro, la belleza y la fealdad, el bien y el mal. Al igual que en la concepción taoísta de Yin-yang, los polos opuestos se complementan para configurar el proceso de lo divino. También considera que la eyaculación es un derroche de energía y enseña a sus seguidores a experimentar el orgasmo sin la emisión de semen. Incluso, hay corrientes que recomiendan el celibato para evitarla.
Estornudos sexuales: Hace unos meses, un británico acudió al hospital aquejado de un raro síntoma: sufría una serie incontrolable de estornudos cada vez que pensaba en el sexo. Su reacción podría ser más frecuente de lo que imaginamos, según revela un estudio médico publicado hoy en la revista Journal of the Royal Society of Medicine.
Según el otorrino Mahmood Bhutta, coautor del artículo, “el reflejo del estornudo es una reliquia evolutiva en las conexiones de una región de nuestro sistema nervioso llamada sistema nervioso autónomo”. Según Bhutta, puesto que este área nerviosa controla respuestas fisiológicas que escapan a nuestro control, como el latido del corazón o la dilatación de la pupila, es posible que un cruce de señales haga que el sexo y los estornudos estén ligados en ciertas personas.
Para buscar más casos como el de su paciente, Bhutta investigó en Internet. Y descubrió testimonios de al menos 17 hombres y mujeres que habían confesado sufrir estornudos inmediatamente después de tener pensamientos sexuales, o incluso después de un orgasmo.
El investigador sospecha que la conexión entre el reflejo del estornudo y la excitación sexual podría ser un fallo genético heredado, más frecuente en miembros de una misma familia, si bien al tratarse de un tema tabú el extraño fenómeno habría pasado inadvertido.
¿Qué es el síndrome post orgásmico?: Científicos holandeses han descubierto un síndrome que hace enfermar a los hombres con una dolencia similar a una gripe tras tener un orgasmo y que podría estar causado por una alergia al propio semen.
Según desvela en la revista Journal of Sexual Medicine el investigador Marcel Waldinger, de la Universidad de Utrecht, el síndrome se conoce como POIS o síndrome post orgásmico, y está documentado desde 2002, cuando se descubrió que algunos hombres, a los pocos minutos de eyacular, comenzaban a tener los síntomas propios de una gripe: fiebre alta, malestar general, picor de ojos y de nariz...
Para sus estudios, Waldinger y sus colegas analizaron a 45 hombres holandeses a los que se les diagnosticó la enfermedad. Treinta y tres de ellos acordaron someterse a una prueba de alergia en la piel usando una forma diluida de su propio semen. De ellos, un 88 por ciento tuvo una reacción de la piel positiva que indicó una respuesta autoinmune o reacción alérgica.
Practicar deporte mejora el sexo: Usando ultrasonidos para medir el flujo de sangre al clítoris, Omer Faruk Karatas y sus colegas de la Universidad de Ankara (Turquía) llegaron a la conclusión de que las mujeres atletas, en comparación con las mujeres con una vida sedentaria, tienen mayor flujo de sangre al clítoris –lo que mejora el orgasmo- y mejor función sexual.  “Para las mujeres, estar físicamente en forma implica que la actividad sexual es mejor”, concluían los autores en la revista Journal of Sexual Medicine publicado el año pasado.
Por otro lado, en un estudio con 31.000 hombres que superaban los cincuenta años de edad, investigadores de la Universidad de Harvard (EE UU) demostraron que hacer ejercicio aeróbico (por ejemplo caminar rápido o correr) entre 3 y 5 horas semanales reduce en un 30% el riesgo de sufrir disfunción eréctil y aumenta la duración de la erección.
¿Es menos intenso el placer obtenido con la masturbación?: La mayoría de las personas cree que el orgasmo que consigue al masturbarse es sólo un sustituto del obtenido con las relaciones sexuales. Pero físicamente el placer puede ser incluso mayor: nadie se conoce mejor que uno mismo. Como decía Woody Allen, “cuando me masturbo estoy seguro de practicar el sexo con alguien a quien amo”.
Si nos limitamos a estudiar el tema fisiológicamente, las cifras son favorables al arte de Onán. Un ejemplo: la media de tiempo que tarda una mujer en tener un orgasmo mediante la práctica del onanismo es de 4 minutos. En una relación sexual con pareja, el tiempo oscila entre 15 y 20 minutos y, además, el placer es, salvo excepciones, menos intenso.
Por suerte, la supervivencia de la especie está asegurada con una serie de mecanismos hormonales que nos hacen buscar la sexualidad compartida. Emocionalmente, el asunto está claro aunque, como el mismo Woody Allen afirmó, “lo mejor de la masturbación es el final: los cariñitos”.
¿Puede un hombre fracturarse el pene?: Sí. Esta lesión urológica afecta a uno de cada 100.000 habitantes. La fractura del pene ocurre por la ruptura de los cuerpos cavernosos durante la erección. Recordemos que el interior del pene lo ocupan tres espacios cilíndricos o senos de tejido esponjoso recubiertos de una capa membranosa. Los dos mayores son los cuerpos cavernosos, que se localizan a ambos lados y por encima del tercero, el cuerpo esponjoso, que abraza la uretra. Estos espacios se llenan de sangre durante la excitación sexual para provocar la erección. Es precisamente en este estado cuando puede ocurrir la fractura, debido a la práctica de posturas eróticas forzadas o si se efectúa una penetración de forma inadecuada. La lesión es sumamente dolorosa y requiere cirugía.
Por qué el placer nos sienta tan bien: Ir de compras, tener orgasmos, aprender, comer alimentos con muchas calorías, jugar a juegos de azar, bailar hasta la extenuación y jugar por internet activan señales que convergen en un pequeño grupo de regiones cerebrales conectadas entre sí del llamado circuito mesocorticolímbico del placer, donde se producen los “subidones” de dopamina. Es más, como nos cuenta el neurocientífico David J. Linden en La brújula del placer (Paidós, 2011), “hasta una simple idea puede activar al circuito del placer”. La parte “oscura” es que este circuito natural e innato también responde a sustancias artificiales como la cocaína, la nicotina o el alcohol, que crean adicciones peligrosas.
Linden, que se dedica a enseñar neurociencia en la Facultad de Medicina de la Universidad John Hopkins (EE UU), consigue en este libro explicar la neurobiología de lo placentero en un lenguaje asequible para todos los públicos. A lo largo de sus páginas habla del botón del placer, de sustancias que “colocan”, del placer de comer, del sexo, de la ludopatía y otras compulsiones modernas... Incluso se atreve a esbozar cómo será el escenario futuro de la ciencia del placer.
Vicio o virtud
Cuando una experiencia nos resulta placentera, cuenta Linden, se ponen en marcha varios procesos: a) la experiencia nos gusta (inmediata); b) asociamos esa experiencia a datos sensoriales externos (lo que vemos, oímos, olemos, tc.) e internos (pensamientos y sensaciones) para poder predecir cómo actuar para repetir la experiencia; y c) asignamos un valor a la experiencia placentera para que en el futuro podamos elegir entre distintas experiencias que nos hacen sentir placer, y decidir el esfuerzo y el riesgo que estamos dispuestos a asumir para obtenerlas.
Ahora bien, como explica Linden, las sociedades humanas tienen “un concepto del vicio que se aplica a la falta de mesura en el comer, el sexo, el consumo de sustancias o los juegos de azar”. Pero lo sorprendente para el investigador es que muchas conductas que consideramos virtuosas tienen efectos similares en el cerebro. “El ejercicio físico voluntario, ciertas formas de meditación u oración, la aprobación social e incluso la donación de dinero pueden activar el circuito del placer”, añade. “Las virtudes y los vicios constituyen una unidad neuronal: el placer es la brújula que nos guía, con independencia del camino que tomemos”, concluye Linden.
¿Para qué sirve el frenillo?: El frenillo es una lámina de piel situada en la cara inferior del pene que une el glande –la cabeza del pene– con el prepucio, la capucha de piel que lo cubre. Su función no es otra que la de proteger el glande, aparte de faciltar los desplazamientos del prepucio durante el acto sexual. No es, como se pensaba, un equivalente masculino del himen femenino que se rompe durante la pérdida de la virginidad. De aspecto similar al que tenemos debajo de la lengua, esta especie de tope penenano puede causar molestias e incluso dolor durante el coito, si su longitud es muy corta. Este problema se resuelve con una sencilla cirugía. En la circuncisión, el frenillo suele retirarse junto con el prepucio.
Quienes murieron haciendo el amor: Atila El rey de los hunos estaba en su momento álgido. Acababa de llegar a un acuerdo con el Papa León I y planeaba su mayor conquista: Roma. En el año 453, se casó con su duodécima esposa, Ilico, una bella y joven muchacha germana. El esfuerzo de la noche de bodas pudo con él, y apareció muerto a causa de una hemorragia nasal.
Papa León VII
Antes de llegar a Sumo Pontífice llevaba una sencilla vida como monje benedictino, pero pereció el 13 de julio de 939 de un infarto mientras mantenía relaciones sexuales.
Félix Faure
Fue nombrado presidente de la República Francesa en 1895, pero su mandato fue interrumpido por la muerte. El 16 de febrero de 1899 expiró con los pantalones bajados mientras una prostituta besaba apasionadamente su miembro. Se dice que la meretriz sufrió un desmayo del que tardó en reponerse.
Nelson Rockefeller
El multimillonario estadounidense murió el 26 de enero de 1979 a causa de un infarto. Se dijo que había fallecido en su oficina de Manhattan, pero los medios de comunicación dieron por hecho que había dado su último suspiro en su casa de Maine, mientras hacía el amor con su secretaria Megan Marshak. Él tenía 71 años y abundante sobrepeso. Ella, 45. Según esta versión, había tenido que luchar por quitárselo de encima antes de llamar a una ambulancia y por eso, cuando llegaron los servicios sanitarios, ya era tarde para reanimarlo.
Que día de la semana es mejor para tener relaciones sexuales: Según un reciente estudio de la London School of Economics and Political Science (Reino Unido) el jueves es el mejor día para tener relaciones sexuales. Se debe a que este día de la semana el cuerpo produce hormonas sexuales de manera más activa. La líbido alcanza su pico máximo en las primeras horas de la mañana del jueves, cuando los niveles de testosterona masculinos alcanzan su máximo nivel y los niveles del estrógeno en mujeres se multiplican por cinco.
Otro estudio de este mismo centro de investigación reveló que los miércoles y los jueves son los días más productivos en el trabajo. Además, el jueves es uno de los días más felices de la semana, posiblemente porque el final de la semana laboral se ve cerca.
¿Cómo funciona el alcohol en la predisposición al sexo?: Que se liga con más desparpajo después de unas copas parece ser un hecho aceptado, pero la desinhibición sexual asociada al consumo de alcohol tiene más que ver con un efecto placebo que con las propiedades de la sustancia. Es decir, nos emborrachamos como excusa para soltarnos la melena. Así se desprende de los resultados de un experimento del Departamento de Psicología de la Universidad de Rutgers, en New Jersey (EE UU), en el que se hizo tomar un líquido a un grupo de voluntarios. A la mitad se la convenció de que era una bebida alcohólica, y a la otra mitad se le dijo lo contrario.
Cuando les mostraron un vídeo erótico, el primer grupo, que creía estar achispado, fue más proclive a afirmar que había tenido fantasías sexuales poco habituales sin sentirse culpable por ello. Esto ocurría independientemente de la composición del brebaje. Obviamente, los contentillos se mostraban más desinhibidos porque podían atribuir sus deseos al alcohol.
Un escáner de tu cerebro permite predecir cuánto engordarás y cuánto sexo practicarás: ¿Se puede adivinar el futuro escaneando el cerebro? En cierto modo sí, según un estudio que acaba de publicar la revista The Journal of Neuroscience. Los autores han encontrado una conexión entre las respuestas del cerebro humano en las neuronas núcleo accumbens -el centro de las recompensas- y el comportamiento futuro con respecto a la alimentación y el sexo. En concreto, analizaron esta región en un grupo de sujetos mientras estos observaban imágenes de animales, de naturaleza, de comida y de personas. Y midieron su peso. Seis meses después volvieron a pesarles y les preguntaron acerca de su actividad sexual. Comparando los datos con los registros cerebrales archivados descubrieron que aquellos cuyos cerebros habían respondido previamente con más actividad eran también los que peso habían ganado en el momento de la segunda prueba. La reacción cerebral ante imágenes con algún contenido sexual también demostró estar relacionado con la actividad sexual.
“Nuestro objetivo es entender las situaciones en las que las personas afrontan tentaciones y logran no ceder ante ellas”, explica William Kelley, investigador del Darmouth College (EE UU) y coautor del estudio. Es decir, la neurociencia del autocontrol y la fuerza de voluntad. “Todo apunta a que el autocontrol requiere mucho esfuerzo consciente”, añade Kelley. Por ejemplo, dicen los autores, si llega la carta de postres en el restaurante es importante ser conscientes previamente de cuánto nos afecta y mantener la respuesta bajo control. En estos casos, un “vistazo” a la actividad cerebral puede ayudar a adivinar cómo nos comportaremos.
¿Quién dice primero "Te quiero" en una pareja?: En las películas románticas de la gran pantalla, es habitual que la actriz protagonista sea la primera en confesarle a su pareja cuáles son sus sentimientos. Sin embargo, según un estudio con cientos de parejas heterosexuales realizado por el psicólogo del MIT Josh Ackerman y publicado en Journal of Personality and Social Psychology, la realidad es bien distinta. Aunque el 64% de las personas creen que las mujeres son las más rápidas a la hora de decir “Te amo”, lo cierto es que son los hombres los que lo suelen adelantarse.
Además, de acuerdo con la investigación, los hombres se sienten más felices si dicen “te quiero” antes de tener sexo con su pareja, mientras que las mujeres son más felices cuando dicen estas palabras una vez consumado el acto.
En un segundo estudio, el equipo de Waldinger decidió intentar tratar a dos de los voluntarios con una terapia de hiposensibilización, usada para tratar alergias, que expone al cuerpo repetidamente a cantidades pequeñas del alérgeno que se incrementan gradualmente a lo largo de varios años. Los resultados mostraron que después de uno y tres años respectivamente, los pacientes mostraban una reducción significativa de sus síntomas.
Como se elige el sexo de un bebe según la sabiduría popular: Si quieres que tu bebé sea varón, ¿deberías alimentarte con más carne roja? Para tener una niña, ¿deberías comer mucho chocolate? ¿o hacer el amor en luna llena?
Todos escuchamos al menos una de estas historias sobre escoger el sexo del bebé antes de concebir, y sabemos que son mitos populares, pero... ¿y si, por casualidad, uno de estos métodos funcionara? Aquellas parejas que darían lo que fuera por tener una niña o un niño quizás quieran intentar alguna de estas técnicas.

Hemos recogido algunas de nuestras creencias populares favoritas acerca de qué hacer para concebir un varón o una niña.

(Una salvedad: si te tomas muy en serio el tema de la elección del sexo deberías leer nuestro artículo sobre lo que dicen los científicos.)
Tu hijo es lo que comes
Según la sabiduría popular, lo que comes antes de concebir puede afectar lo que resulte nueve meses después.

Si quieres un varón...
• Come más carne, cuanto más roja mejor.
• Permanece fiel a los aperitivos salados, como pretzels y papas fritas.
• Futuros papás: hagan una buena provisión de bebidas gaseosas, especialmente refrescos de cola.

Si quieres una niña...
• Ambos deberían comer mucho pescado y vegetales.
• Cede ante tus antojos de chocolate o simplemente come dulces en general.
• Según una pareja mexicana de Texas, tomar muchos lácteos te dará esa niña soñada.
El placer del sexo

Muchas de las creencias populares acerca de la elección del sexo del bebé tienen que ver con la mejor manera de hacer el amor.

Si quieres un varón...
• Recuéstate después de hacer el amor y permanece así durante un rato. Supuestamente, esto permite que los espermatozoides masculinos ganen a los espermatozoides femeninos en su recorrido hasta el óvulo.
• Prueba la clásica posición del misionero (con el hombre encima) cuando hagas el amor.
• Haz el amor estando parado.
• Prueba la penetración por detrás.
• Según una anciana de Oaxaca, México, la mujer debe estar tumbada sobre la tierra, de modo que esté en contacto con su piel.
• Concéntrate en el placer masculino: si el hombre tiene el orgasmo primero, supuestamente tienes un varón garantizado.
• Entrégate a la seducción: si el hombre es quien sugiere intentar concebir, tendrás un varón.
• Duerme a la izquierda de tu compañero.

Si quieres una niña...
• Haz el amor con la mujer arriba.
• Una creencia que nos llega de Oaxaca, México, dice que hay que asegurarse de que la mujer esté en contacto con el agua (basta con que tenga las manos mojadas).
• Concéntrate en el placer femenino: si la mujer tiene el orgasmo antes que el varón, podrás decorar la habitación de rosa.
• Toma la iniciativa: si la mujer comienza el juego sexual, tendrás una niña.
El secreto está en el momento...o la posición.

En una sociedad donde muchas personas aún se guían por su horóscopo diario, ¿es de sorprender que la superstición y las creencias populares también impongan cuándo hacer el amor para escoger el sexo de un bebé?

Si quieres un varón...
• Haz el amor cuando la luna esté en cuarto creciente o cuarto menguante.
• Ten relaciones sexuales de noche (aunque una peruana aseguró que era mejor hacerlo al amanecer).
• Marca tu calendario: se conciben más varones en los días impares del mes.
• Usa la brújula: uno de nuestros usuarios asegura que apuntar la cabeza de la mujer en dirección norte al hacer el amor garantiza un varón.

Si quieres una niña...
• Haz el amor en luna llena.
• Programa una cita íntima por la tarde.
• Tengan relaciones en los días pares del mes.
Mantén la calma y la temperatura

De acuerdo con algunas historias populares, si están relajados al concebir, significa que tendrán una niña. Si están preocupados, tendrán un varón. Pero la temperatura misma también puede influir. Algunos dicen que los testículos deben estar frescos antes de hacer el amor si la pareja desea tener una niña; para tener un niño, es mejor que entren en calor. Esta idea se refleja en la creencia popular acerca de los calzoncillos: usa calzoncillos si quieres un varón, pero si ansías una niña opta por lo holgado (para tu información, hay investigaciones que sugieren que los calzoncillos tipo pantalón corto favorecen la concepción en general).
Lo que se dice por ahí…

Algunas creencias populares acerca de la elección del sexo no cuadran en ninguna clasificación. Por ejemplo, algunos afirman que si la línea de pelo en la base del cuello de tu último hijo se parece a la cola de un pato, el próximo bebé será una niña. Si está en sentido opuesto, prepárense para un varón. Otra creencia popular asegura que el sexo de un bebé se determina según cuál de los miembros de la pareja ejerce el control de la relación en el momento de la concepción.

Y entre algunas hispanas de Los Ángeles existe la firme creencia de que la visualización puede ayudarte a concebir un bebé del sexo que deseas: los futuros padres deben "verse" cargando o alimentando a un niño o una niña, según prefieran, semanas o meses antes de intentar un embarazo, y después repetir esas visualizaciones mientras están intentando concebir. Y desde un pueblo de Michoacán, México, nos llegó la creencia de que el sexo del segundo bebé será el mismo que el del primero, si se concibe antes de que hayan pasado dos años desde que nació el primogénito.
Como elegir el sexo de tu futuro hijo: El sexo del bebé se determina en el momento de la fecundación. El cromosoma del óvulo siempre es X (femenino) pero los espermatozoides pueden ser X o Y. Como los espermatozoides Y (los masculinos) son más rápidos, llegan antes al óvulo, por lo que doctores Shettles y Rorvik afirman que si se mantiene relaciones muy cerca de la ovulación, tendrán ventaja frente a los X y habrá más posibilidades de engendrar a un niño. Pero esto no es todo, recomiendan además, antes del coito, ducharse con una combinación de agua y bicarbonato (para hacer más alcalino el medio), tomarse un café, incrementar la densidad de esperma (absteniéndose de mantener relaciones sexuales durante los 3 ó 4 días previos a la ovulación), que la mujer llegue primera al orgasmo (ya que libera una hormona que hace más alcalino el medio) y tener en cuenta la posición (cuanto más profundo sea el coito más probable será tener un niño).

Para que sea niña,en cambio, habría que seguir los pasos contrarios: mantener relaciones tres días antes de la ovulación; antes del coito ducharse con agua y vinagre (para hacer más ácido el medio); reducir la densidad del esperma (con una ducha caliente previa) y mantener relaciones poco profundas (cuanto menos profunda, menos alcalina es la vagina). Como si esto fuera poco, la alimentación es otro factor a tener en cuenta: los alimentos que favorecen a los varones son altos en sodio y potasio y están casi exentos de calcio y magnesio; mientras que para lograr una niña se deben consumir alimentos ricos en estos dos últimos minerales.

Pero este método no es el único casero, existen muchos ritos y creencias transmitidos por generaciones que si se ponen en práctica, dicen las “abuelas”, permiten elegir el sexo de tu futuro bebé. Por ejemplo, de acuerdo al momento del coito, para tener un niño se dice que hay que tener relaciones con luna menguante a la noche y los días impares del mes. Para una niña, en cambio, en luna llena por la noche, a la siesta y los días pares del mes. Otras tradiciones señalan que el sexo está determinado de antemano y que puede conocerse si se observa la naciente del pelo de la nuca del hijo anterior. Si termina en forma de “colita” el próximo hijo será una niña, si es recta, será un niño.

No falta tampoco el clásico mito de la aguja que dice que si se sostiene una aguja mediante un hilo sobre la palma de la mano de la mujer y la aguja comienza a moverse en círculos, el próximo hijo será mujer. En cambio si la aguja se mueve de adelante hacia atrás será niño. Por último, al menos por ahora, la tabla china de la concepción. De acuerdo a una antigua leyenda china el sexo de tu bebé se determina de acuerdo a la edad materna y al mes de concepción del futuro hijo.

Si se busca apoyo científico, están las técnicas de fertilización asistida. Existe la posibilidad de separar los espermatozoides en el laboratorio y hacer inseminaciones artificiales con esperma del sexo escogido, pero cabe resaltar que ni así se logra más del 80 por ciento de seguridad en el resultado. Respecto a este tema, muchos especialistas no consideran válido escoger el sexo de los hijos por motivos más allá de los estrictamente médicos. “A priori, seguramente que no habrá reparos éticos si la finalidad es evitar el nacimiento de hijos enfermos, mientras que la elección del sexo “per se” podría considerarse más bien algo frívolo, explica un informe de Fecunditas. Aunque no hay garantías de tener un niño del sexo deseado, el nacimiento de un bebé siempre es formidable, cualquiera sea su sexo.

Esta determinado el día de la concepción cuando un espermatozoide fecunda al óvulo de la mujer. Si el espermatozoide X (femenino) fecunda al óvulo, siempre se producirá un bebe ** de sexo femenino. Si un espermatozoide Y fecunda al óvulo se producirá un bebe XY de sexo masculino. Los espermatozoides masculinos Y son más rápidos y les favorece el medio alcalino; por el contrario los espermatozoides femeninos X son más lentos y les favorece el medio ácido. En base a esto, si deseas tener varón debes tener relaciones durante la ovulación, ya que los espermatozoides Y son menos resistentes y se mueren más rápido si no ocurre la fecundación. Asimismo se cree que la penetración vaginal "por detrás" es la más recomendable para tener varón, porque así el semen se deposita en el orificio cervical y la alcalinidad de éste favorece la penetración de los espermatozoides masculinos.
Días y métodos para elegir el sexo del bebe: Hace unos días explicamos algunos consejos y recomendaciones a seguir según las indicaciones del Método Baretta para tener una niña mediante la selección del sexo de una manera natural.
Hoy explicaremos lo mismo pero basado en el deseo de tener un hijo varón.
Para que el bebé sea niño, el espermatozoide que debe conseguir fecundar el óvulo es el que lleva la carga cromosómica Y, para unirse con el óvulo que siempre es X, y dar como resultado la pareja cromosómica XY característica del sexo masculino.
Momento de la concepción
Los espermatozoides con carga Y son más rápidos, más pequeños y numerosos. Llegan antes al óvulo pero viven menos tiempo y necesitan de un medio alcalino.
La relación sexual debería darse en el momento más cercano a la ovulación para aprovechar esa velocidad y concentración superiores de los espermatozoides Y.
Para conocer el momento de la ovulación se pueden usar diferentes métodos que ya hemos explicado en Bebés y más, por ello no me extenderé.
Se trata de los métodos Sintotérmico, en que se controla la temperatura de la mujer de manera diaria hasta observar un pico de temperatura que equivale al día de ovulación (y hacerlo dos o tres meses antes de la búsqueda de la niña para conocer los ciclos y anticiparse a la ovulación), y Billings, en que se valora el moco cervical, que es variable según el momento del ciclo.
También se puede valorar mediante tests de ovulación. La recomendación es utilizar al menos dos métodos a la vez para asegurar lo máximo posible el día de la ovulación.
Dieta
Los espermatozoides con carga Y, como ya he comentado, necesitan de un medio alcalino para funcionar correctamente. Para favorecer que el medio en que se encuentren espermatozoide y óvulo sea alcalino la mujer deberá controlar su alimentación durante al menos tres meses antes de la concepción.
Los alimentos que favorecen este medio y por lo tanto ayudan a que el bebé fecundado sea niño son los ricos en Sodio y Potasio. Por el contrario, los ricos en Calcio y Magnesio favorecen la fecundación de niñas.
La dieta para conseguir un niño varón debería basarse en:
Frutas frescas (una o dos al día y sobretodo plátano).
Paratas (varios días).
Legumbres cada semana.
Sal en las comidas.
Aceitunas verdes o negras.
Hongos y champiñones.
Carne o pescado de manera frecuente.
Pan.
Café, té.
Bebidas con gas o alcohol.
Alimentos envasados, enlatados o industriales.
Y evitar consumir (o comer muy pocos) alimentos ricos en Calcio y Magnesio:
Leche y derivados.
Verduras de hoja.
Repollo, coles, zanahoria, cebolla.
Huevos (limitarlos).
Mayonesa.
Helados.
Repostería.
Frutos secos.
En el libro ¿Niño o niña? Ya puedes elegir de la autora podréis obtener más información al respecto que puede ayudar a llevar a cabo el Método Baretta con más probabilidades de éxito.
Si lo lleváis a cabo, tened en cuenta que sólo hay una oportunidad y que el método no es 100% fiable, es decir, cabe la posibilidad de que vuestro próximo hijo sea una niña a pesar de seguir estas indicaciones (aunque la autora habla de una fiabilidad cercana al 98%, si todo se hace según las pautas comentadas).
Como tener un bebe de sexo masculino: Tener un hijo varón es el sueño de todo padre. Hay parejas que se llenan de niñas porque siguen esperando al hijo varón que no llega. A veces las situaciones de este tipo conducen a la desesperación. Teniendo en cuenta esto, he preparado este artículo para mis queridos suscriptores. Te diré tres pasos que pueden aumentar tus probabilidades (hasta un 90%) de que tú y tu pareja tengan un hijo varón.
El cromosoma Y debe llegar primero
Lo que importa es hacer que el “cromosoma Y” del esperma del hombre llegue primero a fertilizar el huevo. Esto se debe a que el género del bebé esta determinado únicamente por cuál de los dos cromosomas (X o Y) llega primero a fertilizar el huevo. Si el Y llega primero, el niño será hombre. Si gana el X, entonces tendrán una niña.
El esperma que contiene el esperma para los niños (Y) es mucho más rápido que el de las niñas, pero es más débil. Sabiendo esto, podemos utilizar estas características a nuestro favor para influenciar el sexo del bebé.
Como el esperma para varón es más rápido (pero mucho más débil) entonces la mujer debe de hacer el intento para quedar preñada el MISMO DIA que se produce la ovulación (o cuando mucho al día siguiente)… de esta manera los espermas que contienen el cromosoma masculino no tienen que esperar a que llegue el huevo, debilitándose con cada hora que pasa. Si haces el intento aunque sea un día antes de la ovulación, para cuando el huevo llegue y esté listo, ya muchos espermas masculinos habrán muerto.
Debes de saber la fecha EXACTA de la ovulación
Por lo tanto, es de suma importancia que la mujer sepa EXACTAMENTE su fecha de ovulación. Este dato debe ser conocido con mucha precisión. No comtas el error (frecuente) de tratar de adivinar el día, o de hacer aproximaciones rudimentarias basadas en la temperatura o cantidad de moco cervicales.
Debes de usar un método que te dé una respuesta concreta, ya sea afirmativa o negativa. Para esto, existen en el mercado “pruebas de ovulación”… puedes preguntar por ellos en las farmacias. Unos están basados en la saliva, y otros en la orina de la mañana.
Te recomiendo que escojas uno basado en el análisis de la saliva, porque a la larga te salen más baratos, son reusables, son mucho más exactos… y además, no te limitan únicamente a hacer la medición con la orina de la mañana.

Posiciones sexuales que favorecen el embarazo:

A veces el quedar embarazada no es algo que se logra rápidamente sino que puede llevar tiempo conseguirlo. Para aumentar las probabilidades de embarazo se recomienda tener relaciones el día de la ovulación y además tener relaciones en forma periódica, idealmente tres veces por semana como mínimo, donde la posición en la que se tienen las relaciones también será un factor decisivo.
¿Cuáles son las posiciones sexuales recomendadas?
A continuación te detallamos las posiciones y los trucos que aumentarán tus chances de lograr el ansiado embarazo.
  • Posición de plegaria
Existen trabajos de investigación que apoyan que la posición en plegaria (con el hombre detrás o encima) da mayores oportunidades de concepción porque facilita la penetración del hombre más profundamente en la vagina, y en consecuencia se logra una mayor proximidad del semen al cuello uterino.
  • Posición lateral
La posición lateral (con el hombre detrás) es a veces más confortable y también permite mayor contacto con el cérvix uterino, ya que facilita la penetración del hombre más profundamente.
  • Elevación de la pelvis
La elevación de la pelvis de la mujer (mediante un almohadón o almohada), después de la relación sexual, por efecto de la gravedad permite que una mayor cantidad de espermatozoides queden expuestos al cuello uterino, aumentando el número de espermatozoides en la cavidad uterina.
  • Permanecer recostada
Es también muy importante permanecer recostada por lo menos durante media hora después de una relación sexual. Esto facilita la penetración de los espermatozoides en la cavidad uterina y de allí seguir su recorrido hacia las trompas de Falopio, lugar adonde se realiza la concepción (unión del óvulo con el espermatozoide).
  • El orgasmo
La presencia de orgasmo en la mujer también es fundamental, porque consiste en potentes contracciones vaginales y uterinas que tienen como función acercar el semen al cuello uterino, y favorecer la entrada al útero de los espermatozoides.
¿Cuáles son las posiciones no recomendadas?
También existen posiciones que dificultan la concepción. Ellas son en posición parada o sentada arriba del hombre, en las que por efecto de la gravedad, los espermatozoides son evacuados de la vagina más rápidamente y las chances de un embarazo son mucho menores.
Debemos recordar que existen creencias populares que determinadas posiciones en la relación sexual favorecen la llegada de un hijo de un sexo determinado. No hay estudios científicos que lo corroboren.

Eligiendo el sexo del bebé mediante las relaciones sexuales:
Para un niño
Realizar posiciones que aumenten la penetración profunda.
Permanecer recostada 30 minutos después del coito.
Concentrar la estimulación en el placer del varón.
El varón debe dormir a la izquierda.
La mujer mirando el norte.
Los testículos deben estar calientes.
Que el hombre llegue primero al orgasmo.

Para una niña
La mujer sobre el varón.
Iniciativa femenina para el juego.
Concentrar la estimulación en el placer de la mujer .
La mujer alcanza primero su orgasmo.
Los testículos deben estar fríos.
Que la mujer llegue primero al orgasmo.
Eligiendo el sexo del bebé de acuerdo al momento del coito
Para un niño
Con luna cuarto menguante a la noche.
Los días impares del mes.

Para una niña
En luna llena por la noche.
A la siesta.
Los días pares del mes.
¿Cómo puedo predecir el sexo de mi bebé?
Otras tradiciones señalan que el sexo de tu hijo estará determinanado de antemano y que podrías concocerlo de acuerdo a las siguientes creencias.
Según la naciente del pelo de la nuca del hijo anterior
Si la naciente del pelo de la nuca del hijo anterior termina en forma de colita el próximo hijo será un niña. En cambio si la naciente del pelo de la nuca es recta el próximo hijo será un niño.
Según el movimiento de una aguja sostenida por un hilo
Si se sostiene una aguja mediante un hilo sobre la palma de la mana de la mujer y la aguja comienza a moverse en círculos, el próximo hijo será varón. En cambio si la aguja se mueve de adelante hacia atrás será niña.
Según la tabla china de la concepción
De acuerdo a una antigua leyenda china el sexo de tu bebé se determina de acuerdo a la edad materna y al mes de concepción del futuro hijo de acuerdo a la tabla china de concepción.
 Los animales mienten por sexo: En la naturaleza, hacer trampas y engañar para ligar no está del todo mal visto. Según un estudio francés de la Universidad de Lyon publicado en la revista Animal Behaviour, las ranas arbóreas macho (Hyla arborea) más pequeñas se colocan cerca de sus rivales de gran tamaño para que las hembras crean que sus llamadas de cortejo son más potentes de lo que realmente son. Se trata de “tácticas parásitas” en las que los anfibios más diminutos, a la hora de competir por las hembras, aprovechan la energía invertida en la llamada por otros machos más grandes para poder ligar. De este modo evitan la desventaja que les supone ser más pequeños a la hora de buscar pareja.
Este comportamiento se manifiesta sobre todo al final de la noche, y es menos frecuente al atardecer. Y se potencia cuando una rana pequeña se enfrenta a competidores más "atractivos", según concluyen los autores de la investigación.
Como se sabe el sexo de los pollos: Existen diversos métodos, desde los complicados y caros, como el análisis de los cromosomas sexuales y el empleo de instrumentos para ver las gónadas a través de los intestinos, hasta el más sencillo: el discernimiento de rasgos de color o forma de las alas, que están ligados al sexo en algunas razas. Otro sistema universal y muy fiable es la detección de ciertos detalles anatómicos de la cloaca, el conducto donde confluyen el aparato genital y urinario de las crías de las gallinas. Sólo tras meses de abnegada observación y después de molestar a miles de pollitos, se adquiere la pericia necesaria para detectar tales diferencias. El experto sexador, profesión creada en Japón en los años veinte, tiene un índice de aciertos del 99,9%.
Mantener relaciones cambia la genética de las mujeres: Mantener relaciones sexuales puede provocar cambios fisiológicos importantes en las hembras, incluyendo alteraciones en la líbido, la fertilidad, la inmunidad, los hábitos alimentarios, la retención del líquidos y los patrones de sueño, según se desprende de un nuevo estudio realizado en la Universidad de East Anglia (Reino Unido).
Para llegar a estas conclusiones, los investigadores observaron cómo responde la hembra de mosca de la fruta (Drosophila melanogaster) tras aparearse. Así descubrieron que existe una proteína en el semen de sus compañeros varones que produce alteraciones en la expresión del material genético de las hembras. “Hemos puesto a prueba los efectos de una enigmática proteína del fluido seminal, a la que llamamos ‘péptido del sexo’, y hemos llegado a la conclusión de que es capaz de cambiar la expresión de genes en distintas partes del cuerpo femenino, que afectan desde la fertilidad hasta la sensibilidad a los nutrientes o el comportamiento”, aclara la bióloga Tracey Chapman, coautora del estudio. Eso significa, según Chapman, que los machos tienen un efecto directo sobre el sistema reproductor y el comportamiento de sus parejas femeninas, probablemente en la mayoría de las especies animales.
Los chimpases cambian carne por sexo:  El sexo vende, también en la selva. Según un estudio llevado a cabo en Costa de Marfil por investigadores del instituto alemán Max Planck de antropología, las chimpancés hembra copulan con mayor frecuencia con los machos que comparten con ellas la carne que cazan.
Hasta ahora no existían pruebas de este intercambio de sexo por carne, afirma Cristina Gomes, una de las autoras del estudio, que se publica en la revista científica PLoS ONE. Gomes y su colega Christopher Boesch han pasado tres años estudiando a un grupo de chimpancés compuesto por 5 machos, 14 hembras y una veintena de pequeños y adolescentes en el parque nacional Taï, en Costa de Marfil. Allí pudieron comprobar que las hembras de chimpancé tenían sexo con mayor frecuencia con los machos que les daban carne, aunque sólo les hubieran entregado comida una vez, lo que indica que compartir la caza mejora las posibilidades del macho de aparearse. Elena Sanz.

BIBLIOGRAFIA: Revista Muy Interesante